San José, 07 ago (elmundo.cr) – A partir de hoy comienza a regir el nuevo arancel del 15% que el gobierno de Estados Unidos impuso a las exportaciones costarricenses, como parte de la estrategia del presidente Donald Trump de equilibrar la balanza comercial con sus socios en todo el mundo.
La noticia no representa una buena señal para dos sectores particulares: la inversión extranjera directa (IED) y el turismo, sectores que han mostrado comportamientos a la baja este 2025. Así lo determinaron académicos de la Universidad Nacional (UNA).
Inversión extranjera
Leiner Vargas, académico del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (Cinpe), estima que las medidas unilaterales adoptadas por el gobierno de EE.UU. pueden generar un efecto sobre las decisiones presentes y futuras de los empresarios en Costa Rica.
“Nos coloca en una situación muy vulnerable porque las sensibilidades de las decisiones empresariales están en juego por la voluntad política de un gobierno. Ciertamente, Trump ha sido muy claro en indicar que quiere que los negocios inviertan en Estados Unidos y que las cadenas de logística vuelvan a esa nación y eso es muy peligroso para un país como Costa Rica, cuya inversión extranjera depende esencialmente de los estadounidenses”, argumentó Vargas.
La preocupación se agrava al considerar la tendencia actual. Según datos del Banco Central de Costa Rica, la IED cayó un 25% en el primer trimestre del 2025, pasando de $1.235 millones en 2024 a $921 millones este año. A esto se suma el anuncio del cierre de la planta de Intel y la salida de la empresa Qorvo, lo que añade incertidumbre al panorama.
Turismo
El sector turismo tampoco escapa de las consecuencias. De los últimos diez meses, el país acumula nueve con caídas relevantes en el ingreso de visitantes. El único mes con saldo positivo fue abril, que coincide con el periodo de vacaciones de la Semana Santa.
La coordinadora del Observatorio Económico y Social (OES) de la Escuela de Economía de la UNA, Roxana Morales, manifestó que las medidas arancelarias adoptadas por EE. UU. pueden provocar un incremento en los precios de productos y servicios que pagan los ciudadanos estadounidenses. Como efecto colateral, podrían posponer o renunciar a sus planes de viaje.
“Recordemos que Costa Rica recibe en su mayoría a turistas de esta nación, y con los aranceles que se aplicarán, muchas familias tendrían menos capacidad para viajar”, indicó.