San José, 11 jul (elmundo.cr) – Mediante una misiva enviada al presidente de la República, Carlos Alvarado, 8 exministros del Ministerio de Comercio Exterior, señalaron que el nombramiento de Ottón Solís antes la OCDE es “inoportuno, porque introduce una discontinuidad innecesaria y riesgosa para uno de los logros medulares de la Administración del presidente Alvarado y del Congreso”.
Para los exministros “en ese sentido, es conveniente que el trabajo de alta complejidad técnica que demanda la OCDE, así como el desarrollado ya por varios años, no se vea interrumpido o amenazado”.
“Lo anterior sobre todo considerando el ciclo electoral en que está el país que podría afectar esa representación luego de las elecciones del 2022. Ello no sería positivo para la imagen de Costa Rica, como miembro de recién ingreso a la organización”, acotaron.
De igual forma resaltaron que “el nombramiento debe recaer en quien cumpla no solo con los criterios de idoneidad, sino que también tenga disposición de trabajo en equipo, lo cual se ha logrado hasta la fecha con resultados positivos a lo largo del proceso. Anotamos que la Ley 9981 dicta que el jefe de la misión sigue las instrucciones del jerarca de Comex, gestor de la coordinación de todas las entidades del Estado con la OCDE”.
“Además, dicha Ley establece que el nombramiento debe hacerse por iniciativa del Ministro de Comercio Exterior, rector de la materia y conocedor de los elementos que deben valorarse al hacer ese nombramiento. Es claro que el jerarca actual hizo todas esas valoraciones al proponer al Consejo de Gobierno la continuidad del actual representante, con el deseo de que se aprovechen plenamente las herramientas y oportunidades que ofrece la OCDE para avanzar las reformas que tanto necesitamos como país”, recordaron.
“Es por todo lo anterior que hacemos un llamado respetuoso pero vehemente al señor presidente de la República y al Consejo de Gobierno para que reconsideren su decisión del pasado 6 de julio”, desatacaron.
“Se ha hecho gran esfuerzo a lo largo de varias administraciones para adherirse a la OCDE. Se pone ahora en la credibilidad y el prestigio internacionales de Costa Rica, aspectos que no deben exponerse a cuestionamientos sino más bien deben fortalecerse decididamente”, concluyeron.