Cartago, 06 oct (elmundo.cr) – En la localidad de Santa Cruz, de Turrialba, nace en el año 2015, un proyecto de carácter familiar conocido como finca Isamar, dedicado a la producción de leche de vaca.
No obstante, según detalla Froilán Garita, propietario del proyecto “a raíz de la pandemia nos vemos obligados a hacer la transformación del producto; en este caso, transformar la leche de las vacas en otros productos derivados».
«El señor que nos compraba la leche, en un principio se vio muy afectado y ya no podía comprárnosla. Entonces tuvimos que reinventarnos y empezar a transformarla en diferentes productos lácteos, para poder sufragar los gastos, como el pago del alquiler de la finca y lo que conlleva la actividad», comentó Garita.
Entre los productos que elaboran se encuentran: el queso tierno, queso semiduro, queso maduro, natilla y otros tipos queso; por ejemplo, mozzarella y palmito.
Garita nos contó que actualmente se encuentran en un proceso para consolidar la denominación de origen del queso Turrialba, pues, asegura que, «en la zona lo que nos puede diferenciar en sí, es este producto, el cual, de hecho, tiene una denominación de origen», pero, no se ha logrado poner en marcha en la localidad.
Por lo cual, asegura, que le solicitaron al Consejo Regulador, “la certificación del producto, para poder comercializarlo ya como queso Turrialba, como queso original con denominación de origen».
Garita hizo referencia en que «para eso teníamos que pagar una auditoría y un examen de laboratorio, para cumplir con todas las normas; pero, es un costo elevado, lo que pasa en este momento, es que como estamos empezando, los recursos son limitados, pues todavía no hemos podido dar ese paso, pero la idea es que, a corto plazo, tal vez tres meses o menos, poder otorgar este sello a nuestros productos».
De igual forma, resaltó que, a pesar de ser un proyecto familiar, tratan en lo posible de ayudar en la comunidad, «ocasionalmente le damos trabajo a jóvenes de la comunidad cuando uno necesita realizar algún oficio, se contrata mano de obra, más que todo jóvenes, para ayudarlos en lo que son los estudios, o darles un nuevo ingreso para que aporten a la familia», detalló.
Además, comentó que actualmente se encuentran en un proyecto de crear una plataforma virtual, en la cual, varios productores de la zona puedan ofrecer sus productos en línea, «para que la gente de la gran área metropolitana y del país, los conozcan y consuman sus productos sin la necesidad de intermediarios, sino, que sea del productor al consumidor», sostuvo.
Por otra parte, cabe destacar que actualmente finca Isamar, ha sido galardonada con 3 estrellas de la bandera azul ecológica, lo cual ha sido un proceso lento y constante de aproximadamente 2 años, en los cuales han realizado diversos proyectos con la ayuda del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Entre lo que detalla que «con la ayuda del MAG y otras instituciones, se les da un manejo adecuado a los recursos, tanto a los residuos que se producen, como a las aguas verdes, boñiga, y fluidos del lavado de la lechería, todas se recogen y se transforman en abonos orgánicos».
También mencionó que «el agua del lavado de la lechería se reutiliza, pues esta se lleva al biodigestor se produce el gas y el efluente del biodigestor se esparce en los potreros con una bomba de riego, para mejorar el cultivo; además, se cosecha el agua para utilizar agua no potable para lo que es el lavado de las diferentes áreas de la finca».
Garita afirmó que ser galardonados con la bandera azul es una muestra de que están haciendo las cosas bien, «es como devolverle a la naturaleza lo que ella tanto nos da, realizar un manejo más sostenible de los recursos, y con ello, logramos decirle a la gente, que sí se puede trabajar en armonía con los recursos naturales», concluyó.
