San José, 5 jul (elmundo.cr) – El diputado republicano, Dragos Dolanescu Valenciano, cuestionó lo que llama el arte de manipulación del presidente de la República, Carlos Alvarado, pero asegura que “ya no le funciona tanto como antes”.
“Carlos Alvarado se acostumbró siempre a vivir a partir de la manipulación, fue un asesor de segundo nivel en la Asamblea Legislativa, protegido por su padre político, Alberto Salom, donde nunca tuvo un rol importante pero se mantenía a fuerza de la argolla”, señaló Dolanescu.
“De ahí tuvo la suerte de llegar a la campaña de su padrastro político, Luis Guillermo Solís, donde participó en el equipo de comunicación, para pasar a dirigir por unos meses el IMAS, donde no hizo la gran cosa, más que colocar a sus amiguitos y amiguitas de asesores bien pagados, para luego terminar en un Ministerio de Trabajo, donde en unos meses no hizo nada más que ser denunciado por acoso laboral”, apunta el legislador.
Según insiste el diputado “Alvarado empieza su campaña ofreciendo la continuidad del cambio en un anuncio desde el famoso puente la platina, pero cuando vio que su padrastro se llenaba de cemento chino, le dio la espalda, y puso cara de yo no fui, para esa época le tiró a Ottón Solís llamándolo tres veces perdedor”.
“Curiosamente cuando el otrora padre de la ética empezó a figurar en la comisión del cementazo, Alvarado lo llamó de vuelta para intercambiar sombreros y volver a manipular la opinión publica dando a entender de que era lejano a Luis Guillermo, y uña y carne con el otro Solís”, agregó Dolanescu.
Apunta el diputado que “ya en la campaña, ayudado por Ana Helena Chacón, se sacan de la manga la resolución de la Corte IDH para polarizar una elección y con un apoyo ridículo pasar a segunda ronda, donde se dieron fiesta manipulando al electorado ya con el apoyo de medios de desinformación que le debían bastantes favores fiscales al PAC y otros pasquines que viven de fondos públicos”.
“Con la iluminación de un manipulador a sueldo traído desde la izquierda suramericana se inventaron Coalición Costa Rica, para atacar la religión cristiana, pero al mismo tiempo valerse de la fe de los católicos para lograr sus objetivos de mantenerse en el poder y seguir con salarios millonarios cientos de asesores mediocres salidos de la nada”, señala Dolanescu Valenciano.
“En la campaña daba pena ver a un ateo que atacaba desde su literatura barata las creencias cristianas, pero que por arte y magia de una elección se hizo un devoto católico que comulgaba y todo”, apunta el diputado.
Para Dolanescu, Carlos Alvarado “como presidente siguió los primeros meses queriendo manipular, claro con el apoyo de los medios serviles y leales a los favores y a la propaganda estatal, inventando cuanta novela se le ocurría sobre los costarricenses que lo adversan, los inconformes y frustrados por este gobierno”.
“Por suerte las baterías se le están acabando a este manipulador, hoy los costarricenses ya no se dejan engañar y son pocos los que siguen en este juego, los homosexuales que le deben ser participe directo de su lobby, los medios que le hacen eco, principalmente los evasores fiscales, lo que queda de Coalición Costa Rica, que ahora al mejor estilo de la izquierda rancia latinoamericana le organizan marchitas de apoyo”, añade el diputado alajuelense.
“Y es que esas marchitas de blanco para apoyar al gobierno, son copias mal hechas de los intentos de otros dictadores como Maduro y Ortega, solo gobiernos de este tipo autoconvocan marchas de apoyo, apoyados de brigadas oficialistas como la mentada Coalición Costa Rica, bien aprendido tiene el Partido Acción Ciudadana el manual del Foro de Sao Paulo”, finalizó Dolanescu.
