San José, 15 feb (elmundo.cr) – La Curia Metropolitana señaló que han seguido el debido proceso en el caso del sacerdote Mauricio Víquez, quien ha sido denunciado por supuestos abusos sexuales.
El 15 de mayo de 2018 el Vicario Judicial del Tribunal Eclesiástico recibe la primera denuncia contra Mauricio Víquez por supuestos abusos sexuales contra Maikol Rodríguez, desde que tenía 13 años y era monaguillo.
El 16 de junio reciben otra denuncia esta vez de Anthony Venegas oriundo de Patarrá, quién ya se había presentado desde 2003 en la Curia Metropolitana para exponer cierta conducta inapropiada de Víquez.
Ante esto el sacerdote fue removido del oficio de párroco y “se decidió no iniciar ninguna acción que lesionara la buena fama de los menores afectados”.
En junio de 2018 el arzobispo de San José Hugo Barrantes recibe a Venegas y Rodríguez que le manifiestan sus pretensiones económicas por 200 mil dólares para cada uno de ellos, mediante una solicitud escrita con fecha del 27 de julio, la cual fue rechazada por el arzobispo.
Según el comunicado de la Curia el 27 de julio de 2018 se emite un decreto de suspensión de todos los oficios sacerdotales al presbítero Víquez.
Además, aseguran que una vez iniciado el proceso canónico se han dado todos los pasos exigidos enviando lo recabado a la Congregación para la Doctrina de la Fe, en Roma.
