San José, 7 sep (elmundo.cr) – Representantes del Consejo de Transporte Público (CTP), fueron recibidas en la Comisión Permanente Especial de Discapacidad y Adulto Mayor, donde proporcionaron a los congresistas detalles sobre el cumplimiento de la Ley 7.600 de accesibilidad a las personas con discapacidad y adultos mayores en las unidades de transporte público.
En representación del CTP estuvo su directora ejecutiva, Sidia Cerdas, acompañada por Aura Álvarez, directora del Área Técnica, quienes se refirieron a la forma en que se hace cumplir dicha ley de accesibilidad.
Cerdas manifestó que dentro del CTP tiene una gran participación la Unidad de Inspección y Control, en la que se pueden denunciar las disconformidades o irregularidades que se puedan presentar en la prestación de este servicio.
Explicó que luego que se presenta esta disconformidad o denuncia, los técnicos acuden al campo, a revisar la unidad para determinar si la queja es verídica y a partir de esos resultados se toman las medidas correspondientes, que pueden significar hasta la perdida de la concesión.
Cerdas agregó que en el caso de los adultos mayores se mantiene un enlace con el Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor, (Conapan), el 911, la Defensoría de los Habitantes y el Consejo Nacional de la Persona con Discapacidad Conapdis, para que los mantengan informados sobre sus derechos y denuncien irregularidades. Especificó que recientemente realizaron, en Coto Brus, una capacitación con 50 adultos mayores para que ellos conozcan cómo acceder a este sistema de inconformidades, así como a sus derechos.
La legisladora oficialista, María Marta Padilla, se interesó en conocer si en los nuevos contratos que se firman con los prestadores de servicios se están incluyendo todas las especificaciones que contiene la Norma Técnica.
El parlamentario de Nueva República, Yonder Salas, manifestó su preocupación por algunos casos que conoce en los cuales las unidades no están en capacidad de llevar el medio de transporte que utiliza la persona discapacitada e incluso dicho medio sufre algún daño y no reciben indemnización.
La directora del CTP, fue directa en explicar que no hay una silla de ruedas estándar, sino que hay muchas variedades. “Actualmente existen hasta una especie de vehículos, que tienen bastante autonomía, pero son muy pesados, dado el tipo de batería que utilizan y que se están convirtiendo en un problema ya que no caben, por tamaño y peso, en las rampas de acceso”, agregó.
Agregó que las rampas instaladas en las unidades de transporte público, mantienen un estándar internacional, que en promedio soportan los 300 kilos, pero en la actualidad, las personas con discapacidad disponen de triciclos, escúter e incluso vehículos de dos baterías que superan por mucho, el peso establecido en las unidades a nivel internacional.