San José, 10 abr (elmundo.cr) – El exministro de Educación, Leonardo Garnier, aseveró que “los diputados fundamentalistas estaban dispuestos a enterrar la ley de empleo público si no incluía su “objeción de conciencia””.
Para Garnier “no hubo contrapartida de diputados dispuestos a enterrar la ley si mantenía ese absurdo”.
“Resultado: ganó el berrinche, perdieron los derechos humanos”, afirmó.
El exministro hizo hincapié en que “el único camino para salvar la ley de empleo público sin sacrificar los derechos humanos (o preservar los derechos sin sacrificar la ley) era que quienes creían en ambas cosas hubieran peleado tanto como los fundamentalistas pelearon por su berrinche. Pero cedieron. ¿Lección?”.
