San José, 11 ago (elmundo.cr) – Así de enfática fue la expresidenta de la Asamblea Legislativa, Silvia Hernández, en su discurso con motivo de la develación de su retrato en el Congreso, la noche del miércoles.
Hernández señaló que “actos como el de esta noche (miércoles) además del honor que significa para quien nos encontramos en esta posición tan particular son también un poderoso símbolo sobre nuestra democracia”.
Asegura que es labor de todos los costarricenses que el Parlamento “continúe siendo la instancia máxima de representación popular”.
La exdiputada manifestó que su función no hubiera podido ejercerla sin el apoyo de muchas personas, entre ellas su familia; de igual forma agradeció a sus compañeros diputados y en especial a la fracción de Liberación Nacional y a los que fueron miembros de su despacho.
“Hace poco más de 20 años al inicio del siglo XXI, con la ruptura del bipartidismo, el ánimo colectivo que reinaba en Costa Rica premiaba el obstruccionismo parlamentario, entre más mociones para boicotear un proyecto de ley, entre más trucos que se realizaran para impedir que las iniciativas fueran votadas, entre más se usara la palabra como táctica dilatoria, mejor calificada salía la diputada o el diputado”, aseveró.
Hernández indicó que “los partidos se promocionaban por una supuesta fortaleza de su oposición, oposición según cuántos proyectos enterraran y cuántos obstáculos podían interponer en el camino de sus adversarios políticos”.
Según la exdiputada este “filibusterismo parlamentario” le provocó grandes daños a Costa Rica y sus consecuencias en el campo económico las seguimos sufriendo hoy.
La expresidenta del Congreso celebró que en el anterior periodo legislativo hubo un cambio en el discurso político, para abrir más especio de negociación, a la búsqueda de consensos y a alcanzar acuerdos entre las diversas fuerzas políticas.
“Con ese cambio de discurso que transitaba de la confrontación y la obstrucción hacia el diálogo y la construcción resultamos electas las diputaciones para ese cuatrienio”, comentó.
Hernández insistió que “el ánimo que envolvió a la anterior Asamblea Legislativa, donde casi siempre se privilegió la búsqueda de acuerdos, estuvo presente desde el primer día al último día de nuestras funciones”.
“Siempre se buscó encontrar los consensos más amplios posibles para aprobar las leyes que Costa Rica necesitaba”, concluyó.
