San José, 15 feb (elmundo.cr) – El objetivo de Intel para 2023 es inscribir al menos a 2000 personas en sus programas STEM.
La empresa busca que al menos la mitad de sus beneficiarios sean mujeres. Para ello, Intel ha implementado proyectos conjuntos con diversas ONG, escuelas, colegios, universidades, municipios e incluso pequeñas y medianas empresas que se han convertido en sus aliados estratégicos para ayudar a grupos vulnerables en diferentes partes del país.
“Aumentar las vocaciones en áreas STEM sigue siendo un reto, particularmente en las mujeres, por eso, con nuestro programa de voluntariado, buscamos desarrollar proyectos que nos permitan llegar a niños, jóvenes e incluso padres de familia, para mostrarles lo importante que son estos campos y derribar mitos sobre quiénes pueden entrar en ellos”, mencionó Adriana Díaz, directora de relaciones públicas y responsabilidad social de Intel Costa Rica.
Entre las iniciativas se encuentra:
Tecnochicas: proyecto que desarrolla en alianza con Fundación Fundamentes y beneficia a estudiantes mujeres, entre los 12 y 18 años, en Cieneguita, Limón.
MenTe en Acción: este programa se lleva a cabo con la organización Ideas en Acción y tiene tres componentes principales: el programa de pasantías, las charlas, talleres y las mentorías.
Technical Degree in STEAM: este proyecto se trabaja directamente con el Colegio y Centro de capacitación Surí ubicado en Pavas, el cual busca empoderar a mujeres en riesgo social y a sus familias a través de la educación técnica.
Para 2022, INTEL trabajó con aproximadamente 1500 personas en 35 proyectos diferentes, exclusivamente en áreas STEM.
Por consiguiente, durante el mismo período, más de 800 voluntarios de Intel Costa Rica contribuyeron con más de 14.000 horas a 67 diferentes programas de voluntariado que involucran STEM, el medio ambiente y la comunidad, marcando la diferencia.