Continuando con las entregas sobre la calidad de los datos (La importancia de la calidad de los datos), esta semana está relacionado con la calidad de datos desde la fuente primaria.
Parte 2 de 4: La calidad de los datos en fuentes primarias
En la Ciencia de Datos, obtener datos útiles comienza desde su origen. La fuente primaria de información (creación propia de datos, originales y nuevos) es el primer eslabón en la cadena de valor del análisis, y si esa base está mal diseñada, los resultados serán poco confiables. Por eso, asegurar la calidad de los datos desde el momento en que se recogen es tan importante como el análisis en sí.
Uno de los métodos más comunes para recolectar datos es a través de cuestionarios. Diseñar un buen cuestionario no es solo escribir preguntas al azar. Requiere un proceso lógico, claro y disciplinado.
El primer paso es tener muy claro el objetivo de la recolección. ¿Qué se quiere saber? ¿Qué decisiones se tomarán con la información que se origine luego de la recolección? ¿Será necesario hacer algunos cruces entre ella o con otras fuentes? ¿Posiblemente sea utilizada por otros investigadores?, todo el cuestionario debe girar en torno a estas preguntas. Cada ítem debe estar alineado con el objetivo, evitando preguntas innecesarias o fuera de contexto que incrementen el tiempo del entrevistado de forma innecesaria.
El segundo paso es formular preguntas claras, comprensibles y ordenadas. Las preguntas deben estar adaptadas al público al que se dirigen, evitando tecnicismos o ambigüedades. Además, deben respetar una secuencia lógica para no confundir al entrevistado y facilitar de esta maneja la codificación y el procesamiento posterior de los datos.
Un aspecto esencial para garantizar calidad desde la fuente primaria es contar con personas con experiencia en investigación dentro del equipo. Alguien que haya trabajado en tesis universitarias, estudios de mercado o encuestas académicas, laborales incluyendo consultorías puede marcar una gran diferencia. Estas personas saben cómo estructurar instrumentos de recolección, identificar errores comunes y garantizar que el cuestionario cumpla su función de manera eficaz.
Tener esta experiencia permite anticipar dificultades y diseñar instrumentos más sólidos. Incluso quienes no sean expertos pueden aprender mucho de este proceso si trabajan junto a personas con más práctica, lo que mejorará los resultados en procesos futuros.
En definitiva, asegurar la calidad de los datos desde la fuente primaria es construir una base firme para todo el proceso base de la Ciencia de Datos. Un cuestionario bien hecho, alineado con los objetivos y respaldado por experiencia investigativa, garantiza información útil y decisiones acertadas. No se trata solo de preguntar, sino de preguntar con propósito, orden y claridad. Esa es la diferencia entre datos confusos y datos que verdaderamente generan valor.
En la siguiente entrega conoceremos sobre la importancia de contar con datos de calidad.