Sherman Guity, hoy reconocido por sus logros paralímpicos, tuvo un inicio inesperado en el mundo del atletismo. Hace más de 12 años, el 5 de mayo de 2012, participó en su primera carrera durante un torneo regional de la Asociación del Caribe de Atletismo (ASOCARIBE), que se realizó en la pista del Polideportivo Rogelio Alvarado en Guápiles.
En esa ocasión, Sherman corrió con una indumentaria poco convencional: una pantaloneta larga con bolsillos, una cadena colgando de su cuello y una camiseta negra con alas en el frente. Aunque no era un evento oficial, se buscaba identificar nuevos talentos para los Juegos Deportivos Nacionales.
Guity, con apenas 15 años, ya comenzaba a mostrar sus habilidades naturales, sin saber que años más tarde se convertiría en campeón paralímpico y en un símbolo de perseverancia. Su tenacidad lo llevó a superar un devastador accidente de tránsito que le costó parte de su pierna izquierda en 2017, pero que nunca quebrantó su espíritu.
En ese primer torneo de 100 metros lisos, Sherman no logró llevarse la victoria, pero dejó claro su potencial. Curiosamente, fue derrotado por el siquirreño Pablo Arboine, quien en la actualidad es jugador del Deportivo Saprissa. Arboine se llevó el primer lugar con un tiempo manual de 12.14 segundos, mientras que Guity llegó en segundo lugar con 12.15 segundos, en una carrera muy disputada.
Aunque Sherman perdió en los 100 metros, en esa misma jornada ganó los 400 metros, con un tiempo de 59.38 segundos. Esta victoria marcó el inicio de su prometedora carrera en las pistas, mostrando su gran habilidad en pruebas de velocidad.
De acuerdo con Más que Correr CRC, medio especializado en atletismo, el potencial de Sherman quedó claro desde aquel día. A finales de ese año, representó oficialmente a Limón en las eliminatorias hacia los Juegos Deportivos Nacionales, donde logró clasificar en varias pruebas. Aunque no alcanzó el podio en su debut en los Juegos Nacionales de Desamparados 2012, Sherman continuó enfocado en mejorar sus marcas, lo que años más tarde lo llevaría a la gloria paralímpica.
