Existen muchas variedades de salsas para la carne. Pero para la carne asada, no hay como los acompañamientos bien condimentados.
Adam Ramírez es maestro parrillero en Estados Unidos. Suele ofrecer salsas en pocillos para que cada comensal sumerja sus trozos de carne en esas exquisitas especias. Las salsas picantes saben particularmente bien con la carne de cerdo, que también adquiere un sabor irresistible cuando se la prepara a la parrilla.
Ramirez recomienda sobre todo la siguiente variante: mezclar tres pocillos pequeños de vinagre de manzana con un pocillo de agua. Añadir pimienta de Cayena, ají en polvo, sal y azúcar. Quien prefiera un sabor algo más fuerte puede añadir media cucharada más de pimienta de Cayena. ¡Listo! Es muy sencillo de preparar y cambia totalmente el sabor de la reunión.
