San José, 14 ago (elmundo.cr) – Gruma Costa Rica anunció que reducirá en un 4% su huella de carbono mediante la incorporación de ocho vehículos 100% eléctricos a su flota en el país. Con esta acción la compañía dejará de emitir 59.740 kg de CO2 por año, equivalentes a un ahorro anual de 25.500 litros de gasolina.
Esta adquisición tiene por objetivo disminuir los impactos de sus operaciones en el medio ambiente y contribuir a un futuro más sostenible.
Estas nuevas unidades eléctricas – cuya inversión ronda los US$300.000- forman parte de un proceso de cambio de la flota de vehículos livianos en rutas de preventa del canal detallista. Para el 2024 se espera incorporar otra cantidad importante de autos eléctricos, como parte de un plan piloto para sustituir, poco a poco, los vehículos de combustible por vehículos eléctricos.
“Gruma asume diariamente un compromiso con la sostenibilidad, que nos impulsa a trabajar de manera responsable con el medio ambiente y la sociedad. La operación de vehículos eléctricos responde a nuestro compromiso ambiental para eventualmente migrar hacia unidades cero emisiones y reducir la contaminación”, expresó Ivania Alpízar Rojas, Gerente de Comunicación y Desarrollo Organizacional de Gruma Centroamérica.
De acuerdo con el Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (INGEI), el transporte genera el 42% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Costa Rica.
“Nuestros nuevos vehículos eléctricos representan una gran oportunidad para reducir las emisiones que emite el transporte, así como para mejorar el grado de satisfacción de nuestros colaboradores, proveedores y clientes al reconocer en Gruma a una organización responsable e interesada por su entorno”, afirmó Alpízar.
Gruma piensa en las generaciones futuras, por lo que se une a la visión país con el Plan Nacional de Descarbonización 2018-2050, que pretende evidenciar el compromiso de Costa Rica por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Movilidad sostenible
Entre las características de estos autos se pueden destacar la autonomía de kilómetros recorridos, son vehículos muy confortables y aptos para transitar en el país, tanto en zonas rurales como en la Gran Área Metropolitana.
La implementación de vehículos eléctricos representa diversos beneficios operativos, pues favorecen el ahorro económico, la exención en la restricción vehicular, el uso de parqueos azules y propician una menor contaminación acústica, al emplear motores más silenciosos que los tradicionales de combustión.
La implementación de vehículos eléctricos está alineado a las tendencias mundiales de responsabilidad con el medio ambiente y la sostenibilidad, que ya son parte de la forma de operar de las compañías.