En 1903, la creación del cantón de Turrialba permitió a sus pobladores impulsar la creación de un centro de desarrollo que fomentó la actividad económica. Es así, como los cultivos de café, banano y la caña de azúcar, comenzaron a cultivarse en gran escala (producción para exportar) y dieron origen a las grandes haciendas de la región, en donde sobresalieron Aragón, Florencia y Aquiares como un claro ejemplo de progreso agrario ligado al comercio exterior.
Esto supone que el desarrollo del cantón de Turrialba está íntimamente ligado al de su gobierno municipal, y en la creación de condiciones, materiales y subjetivas, para el cambio. Los desafíos entonces pasan por replantearse el modelo dominante de gestión municipal, para explicar la poca capacidad de los gobiernos municipales de asumir sus roles e impulsar procesos de desarrollo basados en sus capitales y capacidades instalados en su territorio.
En los últimos años se observa un cambio en los gustos de los viajeros hacia nuevos tipos de turismo consistente en conocer nuevos destinos, realizar diferentes actividades y buscar propuestas relacionadas, en ciertos casos, con las costumbres locales, con lo étnico y con los orígenes de determinadas culturas.
Esta claro que el turismo impacta transversalmente sobre las economías de las sociedades anfitrionas, lo que supone que además de generar rentas y empleo, transmite valores, formas de entender la vida, y sus efectos van mucho más allá del sector del ocio, el transporte y hospedaje.
En este sentido, Turrialba debe experimentar con el turismo de montaña y la diversidad cultural como forma de enriquecer la experiencia del turista. Todo ello ha permitido que en determinados lugares, hasta entonces fuera de los tradicionales circuitos turísticos, puedan posibilitar la creación de productos turísticos basados en dar respuesta a estas inquietudes.
Esta claro, que la comunidad debe hacer énfasis al esfuerzo colaborativo para construir economías basadas en productos de la localidad, zona o región. En este contexto, se puede definir el desarrollo económico del cantón como el proceso de transformación de la economía y de la sociedad local, orientado a superar las dificultades y retos existentes, que busca mejorar las condiciones de vida de su población mediante una acción decidida y concertada entre los diferentes agentes socioeconómicos locales, públicos y privados.
Desde tiempos inmemoriales, las montañas han sido fuentes de inspiración, incluso muchas culturas las han considerado como sitios mágicos. Esta fascinación por las montañas ha permanecido, debido a sus paisajes, biodiversidad, cascadas y el aire limpio que de ellas emana.
Su explotación se ha apoyado en modalidades que poco a poco se han encontrado por todas partes. Bien sea en los diferentes modelos de consumo como lo son: el senderismo, paracaidismo, cicloturismo, y las excursiones a caballo etc.
El turismo de montaña y la naturaleza podrían convertirse en una fuente de atracción, terapia, inspiración, emoción, de espectáculo, y de convalecencia. La naturaleza tiene el poder de brindar energía.
Finalmente, la montaña puede convertirse en un producto. Su explotación requiere cierto número de apoyos económicos y las condiciones técnicas naturales que permitan su realización y su desarrollo.
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