Se la compro don Roberto Thompson

» Por Francisco Javier Sánchez Gómez - Economista, regidor presidente Concejo Municipal Alajuela

He escuchado y leído con mucha atención la entrevista que usted brindó hace unos días a este diario digital elmundo.cr. En ella, indicó que ha recibido una ciudad en total abandono. Estoy de acuerdo, pero ampliaría la afirmación diciendo que hemos recibido un cantón en estado de abandono. Sin embargo, este abandono no es reciente ni exclusivo de la administración pasada, a pesar de sus esfuerzos por concluir obras con años de atraso, como la terminal de autobuses, el inicio de obras en la radial El Coyol, la conclusión del puente a dos carriles en el sector de COLYPRO en Desamparados y el inicio del puente en el sector conocido como La Mandarina. El abandono persiste y data de más de 15 años, con administraciones que han gobernado el cantón por más de 30 años. Estas administraciones se han enfocado en aspectos secundarios, sin un plan de desarrollo que priorice necesidades. Se han dedicado, en gran medida, a construir salones comunales por doquier, donde los dirigentes son protagonistas, a realizar bailes costosos y a llevar a cabo obras de poco impacto para la mayoría de los ciudadanos. Incluso, se busca sacar rédito político de un simple bacheo de calles como si fuera una actividad extraordinaria.

A pesar de este abandono de décadas, apoyo su propuesta de hacer del cantón de Alajuela y, sobre todo, de la municipalidad de Alajuela, un lugar eficiente. Debemos asegurar que el bienestar de los ciudadanos sea el eje central de las decisiones, no el rédito político de los dirigentes. Se debe gobernar para la mayoría de la gente, asegurando servicios de calidad a precios justos, como es necesario en el servicio de alcantarillado pluvial, donde se cobra a los ciudadanos sin recibir el servicio adecuado. También es esencial atender las solicitudes en tiempo y dar soluciones reales, priorizando la seguridad, el ornato, la recreación para todos, la generación de empleo de calidad y la mejora vial, con el único fin de mejorar la calidad de vida de todos.

Apoyo sin objeción la necesidad de una reestructuración administrativa, idea que planteé en nuestra primera reunión y que he venido enfatizando a lo largo de estos primeros tres meses. Espero que se incluya en el próximo presupuesto ordinario. No se puede continuar con una estructura administrativa que, según el informe de ingresos y gastos presentado por la alcaldía la semana pasada, muestra una ejecución real del 27.23% en la administración, del 18.14% en programas de servicios comunitarios y un patético gasto real del 8.70% en inversiones de desarrollo. En términos generales, de los 49 mil millones al 31 de junio de 2024, solo se han ejecutado 8 mil millones, de los cuales 5 mil millones corresponden al pago de salarios. En este primer semestre, la municipalidad ha funcionado correctamente solo en el pago de salarios. La reestructuración administrativa sin duda requerirá ceses y reasignaciones de plazas, la modificación de procesos y trámites que beneficien al ciudadano, la creación de una dirección de seguridad ciudadana, y una mayor atención al área social, que no debe limitarse a la organización de bailes y algunos talleres en horarios laborales cuando la mayoría de los ciudadanos no pueden participar. El ornato y el mantenimiento de parques no deben ser solo para el primer distrito, el cual también presenta serias deficiencias. La recreación debe extenderse a todos los distritos, y la cercanía con el aeropuerto debería convertirnos en un cantón turístico, con los beneficios que esto representaría para la economía y la cultura del cantón. Es necesario establecer políticas claras para la atención de habitantes en situación de calle, la juventud, el adulto mayor, la cultura y la seguridad; es decir, una reestructuración en favor del ciudadano.

Finalmente, el plan regulador debe ser más que un proyecto de organización urbanística; debe ser una visión de cómo queremos ver el cantón en el mediano y largo plazo. Era lo más responsable suspender su audiencia, ya que íbamos a una sesión de audiencia pública un mes después de haber entrado como regidores, con un desconocimiento total por parte de los regidores y de la ciudadanía en general. Era irresponsable llevarla a cabo en esas condiciones. Nos hemos tomado un tiempo para revisarlo y socializarlo con las comunidades, con el objetivo de que sea un plan que genere desarrollo, calidad de vida, protección del recurso hídrico y mejora de la vialidad, todo en beneficio de la calidad de vida del ciudadano, que es nuestro fin último.

Don Roberto, como le mencioné, apoyo su propuesta y espero, en los próximos días y semanas, una propuesta seria de mejora, planificada, con objetivos, presupuestos, responsables y cronogramas. Trabajemos en proyectos cantonales y allí estaremos en la construcción de un mejor cantón.

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