La idea de construir una trocha fronteriza con Nicaragua fue un proyecto oportuno y recurrente de la ex Presidenta de la República doña Laura Chinchilla, quien; si se puede llamar “pecado” fue de rodearse y designar a unos “choriceros” quienes cometieron la estafa más burda y descarada del siglo y; que echaron abajo la trocha.
Ojalá que la justicia cumpla con su cometido y castigue a los pillos, vale la pena reiterar que las huestes uniformadas que vigilan el río San Juan molestando a nuestros estudiantes, no son de confiar y nada recomendables, amén; de que la trocha sería de gran progreso para las comunidades aledañas para el transporte de sus productos: un proyecto de CONAVI para el arreglo de la trocha es digno de alabar y; si hablamos de financiamiento hay millones de colones engavetados en las cajas de muchas instituciones del Estado sin ejecutar, que podrían servir para el arreglo, solo depende del patriotismo y la honradez de las autoridades competentes para que la obra sea una realidad cercana; que lleve progreso, servicios básicos y; ante todo dignidad y libertad de movimiento a nuestros compatriotas fronterizos.
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