La guerra de poder sobre el río Nilo

» Por Marianne Zamora Carvajal - Estudiante Relaciones Internacionales

El Nilo es uno de los ríos mas importantes y famosos que existen, históricamente se consideró una fuente inagotable de recursos, esto por sus generosas aguas, y que por mucho tiempo fue el soporte de alimentos de uno de los países cercanos que fue Egipto, y se encuentra entre las vías fluviales más largas del mundo, llevándolo a ser un punto esencial y estratégico para los países que lo rodean, como en el caso de Etiopía, ya que este lo considera como una nueva fuente de energía sustentable para el país, y se planteó construir una represa, según el gobierno etíope, asegurando que esto podría sacarlos de la pobreza, y generar desarrollo en todo el continente.

Esto ha provocado una alerta para los países cercanos como Egipto y Sudán, ya que les preocupa que la construcción de esta nueva represa sea una amenaza hacia el suministro hídrico para ambos países que el Nilo les genera. Sin embargo, es importante destacar que este no es un conflicto actual, ya que las conversaciones acerca del Nilo tienen cerca de 10 años, sin poder llegar a un acuerdo, y en este punto la represa está casi acabada.

Lo anterior deja en manifiesto algunos problemas a la hora de manejar la negociación, y denota la importancia que le está dando Etiopía a los recursos naturales que les genera, cuestionándose si a la hora de la construcción de la represa se consideraron los riegos generados, no solo para los países cercanos, si no también para el propio río.

Un tema que no se le esta dando mucha visibilidad, que de igual forma es bastante importante, porque aún existen personas que conservan el paradigma sobre recursos naturales como inagotables, cuando la realidad es otra, y donde en el caso en cuestión, la preocupación por parte del gobierno de Etiopía es casi inexistente, aferrándose a la idea que esta represa podría ser el boleto dorado para posicionarse como un país en desarrollo, sin considerar el riesgo a dañar el suministro acuífero a futuro.

Lo anterior incluso, ha generado la sensación de una posible guerra, tal y como lo asegura en exmiembro sudanés del equipo de negociación, Ahmed al-Mufti, quien afirmó en declaraciones para la Agencia Anadolu que Etiopía está haciendo que las negociaciones fracasen, y que “a Sudán y Egipto no le queda más remedio que entrar en un conflicto con Etiopía”. Pero aun así con todas estas amenazas en contra, la represa empezó el proceso de llenado en julio del 2020, una total negligencia por parte del gobierno etíope al no conciliar un acuerdo con los otros Estados en cuestión.

Es posible que el conflicto sobro el río Nilo se pueda considerar como la primera guerra de agua. Sudán y Egipto empezaron a recurrir a la ayuda de una intervención por parte de la Unión Europea, los Estados Unidos y la ONU, además de la Unión Africana, para mediar, esto ocasionó que Etiopía considerara esto como un intento de trasladar las negociaciones fuera del marco africano. Una guerra de poder sobre quien tiene mas derechos sobre el Nilo, algo bastante injusto para los 100 millones de habitantes de Egipto, que dependen casi por completo de este río.

En este punto, la intervención internacional es prácticamente nula, y se puede ver como Etiopía hizo lo que quiso con la represa, pasando por encima de todas las mediaciones que se hicieron para llegar a un acuerdo, por lo cual no sería tan sorprendente si eventualmente se diera un ataque directo por parte de Egipto y Sudán. No se contempla aun que un conflicto por esta infraestructura se pueda desatar, pero sí está claro que la conveniencia de haberla construido sin el beneplácito regional podría escalar las tensiones del continente.

Preocupa la poca importancia que a nivel de la opinión público se le ha dado a este tema, como de algún modo las personas no ven la gravedad de, no solo una guerra por un recurso natural tan importante como el agua, si no también como esto puede afectar a la población de la zona, y en medida al mundo.

En pleno siglo XXI donde el cambio climático y la contaminación están llevando al borde del colapso al planeta, donde los humanos se creen dueños de todo lo que aporta la tierra, y no ven las consecuencias de sus actos, y aún más preocupante como ni siquiera organizaciones tan importantes como la ONU están interviniendo para poder resolver este conflicto, y no evitar que estalle la pronosticada guerra de poder que es esta.

El desinterés que existe sobre el planeta es preocupante, donde las nuevas generaciones están encargadas de arreglar los errores de las pasadas, poniendo en perspectiva las posibles soluciones para poder tener un mundo digno para las poblaciones del futuro, y este es solo un caso entre muchos de monopolio sobre recursos naturales que simplemente se están adueñando como si no tuvieran un límite, sin importar las consecuencias globales, sin interés por la vida, creyéndose dueños de todo lo que ven rentable para volverse más ricos, arrasando con todo a su paso.

Es tiempo de concientizar más, pensar un poco mas en el futuro, y en qué tipo de mundo se quiere tener los próximos años. Comenzar a cuidar mas lo que tenemos, vivir con lo justo, y con menos avaricia, permitir una vida digna para todos, que, de seguir a este ritmo, no habrá mundo sobre el cual seguir sobreviviendo.

Los artículos de opinión aquí publicados no reflejan necesariamente la posición editorial de EL MUNDO. Cualquier persona interesada en publicar un artículo de opinión en este medio puede hacerlo, enviando el texto con nombre completo, foto en PDF de la cédula de identidad por ambos lados y número de teléfono al correo redaccion@elmundo.cr, o elmundocr@gmail.com.

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