Hasta cuándo permitiremos que los Seres Humanos se ataquen entre ellos,
Hasta cuándo daremos la espalda a las personas que sufren,
Hasta cuándo se verá correr la sangre de muchos inocentes por la codicia de unos pocos,
Hasta cuándo se aprenderá que la Historia sirve para no repetir sus errores,
Hasta cuándo una lágrima de dolor cambiará el corazón de un dictador,
Hasta cuándo el recuerdo del Holocausto nos enseñará que el odio a un grupo de personas no es la forma de gobernar una democracia…
Hoy se conmemora el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto; un recuerdo atroz y doloroso para la Humanidad, sin embargo más que una mancha en la Historia debe ser un llamado de atención a todo aquel que use o designe términos sin saber fielmente lo que una palabra puede generar en otra población.
Más de 6 millones de personas murieron, pasando torturas y humillaciones en manos de un grupo “socialdemócrata”, donde familias enteras y poblados se derrumbaron en cenizas para “limpiar” una sociedad que no quería reconocer el verdadero problema que se estaba generando en las secuelas pos-guerra; y otros más que se hacían de oídos sordos ante esta amenaza social.
Por lo tanto, mi fin es remover un poco los sentimiento de las personas que lastimosamente no quieren reconocer lo que el Holocausto (más los pogromos y torturas) duele en la sociedad y en la vida…
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