Ya casi cuarto y último año de este gobierno de turno y todavía solo nos informan de encuestas de popularidad. Y los informes de evaluación de resultados? Somos una maravilla de democracia. Tenemos nuestra democracia a la tica. La democracia del pura vida. Es una marca país. Una democracia de exportación. Sin embargo, pasan los años y no ha habido forma de controlar y enderezar el rumbo de la clase política, básicamente porque la Defensoría, que solo insta y opina de cualquier cosa pero nadie le hace caso, el TSE y la Sala IV, ayudan demasiado poquito a Costa Rica. Y bueno, es porque además, nos falta corregir un pequeño defecto: tenemos ineficiencia en los 3 Poderes de la República. Claro, con 200 años de antigüedad, puede ser que ya llegamos a la edad de los nuncas.
Nuestros procesos electorales tienen mucho que mejorar para proveer, más y mejores políticos y funcionarios públicos, con más y mayores deseos de servir a la Patria. El propósito principal 2026 debe ser disminuir los vergonzosos niveles del crecimiento del abstencionismo. Para nosotros los votantes, qué maravilla la internet y todas las redes sociales actuales para enterarnos de inmediato de todo lo que hacen y no hacen los gobiernos de turno. Antes había que depender de periódicos y noticieros apenas para medio enterarse, semanas, meses y años después, de lo que ya se había hecho y que de por sí, ya nada podíamos hacer. También es muy importante la participación cada vez, de más y más costarricenses por medio de todas las redes sociales, ahora que están de moda, para ayudar finalmente a conseguir por fin, una Costa Rica bien administrada o bien gobernada. Usando el término que sea. De suerte que ahora con la existencia de las redes sociales, todos los costarricenses podemos participar de este cuarto poder ampliado de las democracias, para que más pronto que tarde, todos los costarricenses tengamos más y mejores beneficios, de esta nuestra democracia del pura vida.
En tres años de este gobierno de turno y no vemos resuelto casi nada. Problemas heredados, remiendos a los problemas viejos, problemas nuevos por no haber resuelto los problemas viejos, regla fiscal y ley del empleo público para unos pero no para otros, privilegios salariales por todas partes del sector público, caso cochinilla, caso diamante, la trocha, repúblicas independientes, recursos ilimitados para el FEES en detrimento de la prioridad que es la educación pública primaria y secundaria, pensiones de lujo, otro aguinaldo para el sector público mal llamado salario escolar, expedientes judiciales sin resolver compitiendo en cantidad y tardanza con las listas de espera sin fin de la CCSS, hospitales y carreteras en lento proceso, inseguridad galopante, etc, etc.
Entre otros muchos temas pendientes también debe resolverse la prohibición para la no existencia de diputados de partidos, que luego se declaran independientes, que estuvieron de moda en las elecciones anteriores y, que en este nuevo gobierno, otra vez ya se han presentado varios casos. No podemos seguir con los mismos procesos electorales de hace 200 años. También se prevendrían y se evitarían muchos otros problemas, si la Sala IV por fin tuviera entre sus prioridades, estar actualizando diariamente todo lo relativo a nuestra Constitución Política: la interpretación correcta y las mejoras necesarias de artículos como los relativos a las convenciones colectivas y al 8% del PIB imposible e innecesario para financiar a la educación pública, por ejemplo, si va a seguir siendo prioridad el FEES en detrimento de la educación pública primaria y secundaria. Ya hace varios años se permitió la innecesaria reelección presidencial, así que sí se puede modificar todo lo que sea necesario, para beneficio del Estado y de todos los demás costarricenses.
Para eso es un nuevo gobierno. Pero el nuevo gobierno de turno no es solo el nuevo presidente, todos los partidos políticos representados en la Asamblea Legislativa son también parte del nuevo gobierno de turno y, todos deberían estar trabajando de conformidad con sus planes de gobierno, esos que el TSE les aprobó de previo a las elecciones. Los planes de gobierno de los partidos políticos deberían ser mucho más que solo un requisito de presentación ante el TSE para poder participar en las elecciones. En la Asamblea Legislativa, los diputados tienen mucho que hacer, mucho que arreglar, mucho que corregir. Empezando por recordar que según el TSE, los diputados electos, representan a las diferentes comunidades del país, excepto los mal llamados diputados nacionales, que son escogidos a dedo por el candidato presidencial, que antes era uno y ahora el PUSC quiere que sean dos. Lo importante es que tengamos trabajo productivo en beneficio de nuestro país y en beneficio de todos los costarricenses.
Pero para los partidos y para los candidatos, ahora es más complicado presentar y someter su hoja de vida para el escrutinio de los votantes. Tanto es así, que para las elecciones anteriores para el tercer año del gobierno de turno, como estamos a hoy, ya habían partidos y hasta candidatos proponiendo sus nombres. Claro que como país, tenemos aún algunos defectos importantes, pero, en ausencia desde hace muchos años, de partidos políticos permanentemente organizados y en ausencia también de políticos ejemplares, contamos ahora con la participación activa de cada vez más y más costarricenses por medio de todas las redes sociales. Recordemos que para estas últimas elecciones presidenciales la votación de los costarricenses significó entre otras cosas, la extinción de varios partidos políticos como el PAC y el PASE, principalmente. También hemos conseguido variantes favorables para la no reelección de diputados y alcaldes, después de años y años permitiendo ver a los mismos partidos y políticos de siempre, como diputados y alcaldes repitentes. Así como hemos obtenido algunas mejoras en este proceso electoral de los gobiernos locales, como eliminar lo vitalicio de algunos funcionarios públicos que se les permitía reelegirse indefinidamente, a permitir ahora, solo dos periodos continuos de cuatro años. Pero tienen que haber más y mejores ideas porque no podemos seguir con estos vergonzosos niveles de abstencionismo.
Los costarricenses consideramos sin embargo, que se pueden llevar a cabo aún gran cantidad de mejoras en estos nuevos procesos electorales, para beneficio del país finalmente y, en principio para empezar a disminuir el abstencionismo, promoviendo un mayor entusiasmo de los electores. Por ejemplo, no seguir permitiendo la doble postulación de candidatos a la vez, tanto para el Poder Ejecutivo como para el Poder Legislativo, en el mismo proceso electoral. Así como no seguir permitiendo ninguna reelección en ningún puesto público, por un lado porque todos los demás costarricenses también tienen derecho a elegirse y, por otro lado, porque existen muchos otros puestos para los cuales pueden postularse los funcionarios que ya han servido en otros puestos. Y menos, seguir permitiendo reelecciones de 8 larguísimos años en el Poder Judicial.