El doble estándar en el conflicto palestino israelí y algunas omisiones respondidas desde el derecho internacional

» Por Mijael Aviram - Abogado

Hace algunos días salió en este mismo medio, un larguísimo artículo cuyo autor es un asiduo crítico a las acciones de Israel y quien, haciendo uso de largos discursos, aprovechando el espacio que se le brinda, expone con supuestos argumentos, elementos para señalar y criticar única y exclusivamente las acciones de Israel en el actual conflicto en Gaza. Es por esta razón me he tomado a la tarea de responder de una forma breve, pero basada, algunos de los aspectos más importantes desarrollados en ese artículo sin caer en el desgaste de los lectores.

En primer lugar, es importante mencionar que el artículo se presenta con una insistente narrativa en la cual se omiten adrede contextos de carácter histórico, legales y estratégicos del conflicto entre israelíes y palestinos, que no pueden ser omitidos porque se quedaría sin la esencia desde donde ocurren los hechos más importantes.

Se debe recordar que, desde su independencia, Israel ha sido hostigado y amenazado en su derecho de existencia, basado por supuesto en el principio de autodeterminación de los pueblos y, además, en la Resolución 181 que permitía la posibilidad que la población judía del Mandato Británico de Palestina proclamara su independencia, sin que esto restara la posibilidad que la población árabe palestina pudiera tomar una decisión similar que finalmente no hicieron.

Aun si se tomara la situación coyuntural, se debe recordar que las organizaciones islamistas en la Franja de Gaza decidieron lanzar un ataque masivo contra territorio israelí causando cerca de 1.200 muertos y secuestrando también a cerca de 250 personas, de las cuales varias aun hoy continúan en cautiverio sin poder siquiera recibir visitas por parte de la Cruz Roja Internacional, ni conocerse las condiciones de su paradero, en contravención inclusive de la Convención de Ginebra de 1949 y de la Convención contra la toma de rehenes de 1979, entre otras violentadas por los grupos islamistas de Gaza, los cuales en el artículo en cuestión no recibe ningún tipo de crítica, por lo que el sesgo está claro.

Inclusive, si se compara las acciones de Israel con las que ocurren en otros conflictos armados en la zona, incluyendo Siria y Yemen se podría catalogar de proporcionada en virtud de la cantidad de civiles que han fallecido y la intención de Israel de minimizar los castigos colectivos y la afectación civil. Por ejemplo, en Yemen cerca de 2.2 millones de niños están considerados en desnutrición aguda, y un número por encima de 1.3 millones de mujeres en condición de embarazo o lactancia se encuentran en condición de desnutrición, poniendo en riesgo la vida de sus hijos y las propias, situación que en Gaza es diferente pese a los problemas de ingreso de suministros, muchos de los cuales han sido robados por los grupos islamistas que gobiernan Gaza.

La acusación de plausibilidad de genocidio presentada por Sudáfrica no fue tomada en cuenta, no hubo una decisión categórica de los jueces de la Corte Internacional de Justicia, sino que existieron posiciones diversas que impidieron su ejecución y por esta razón no se pudo exigir un alto al fuego inmediato, pero se dejó abierta las posibilidades que en algún momento se estudie en el fondo lo ocurrido. Lo que sí queda claro es que el hecho que más países se sumen a la causa de Sudáfrica para acusar a Israel solamente demuestra lo politizado que está el sistema en este caso específicamente, que no ocurre con otros alrededor del mundo.

Se utilizan datos de civiles muertos en Gaza, omitiendo que la información proviene de fuentes vinculadas con Hamas, las cuales siguen en cuestionamiento e incluso fueron puestas entre dicho por análisis como el realizado por The Henry Jackson Society y ampliado por incluso funcionarios de las Naciones Unidas que han puesto en entredicho los números presentados hasta el momento que omite la cantidad de militantes de los grupos terroristas palestinos o los datos manipulados donde se colocan nombres de adultos en el dato de mujeres o de niños.

Ignorando, además, la cantidad de muertes que fueron ocasionadas por los grupos terroristas en Gaza ya sea por el fallo en el lanzamiento de proyectiles, el uso de zonas civiles para el ataque contra posiciones israelíes o el uso de escudos humanos, tema que ha sido documentado a lo largo de los años de enfrentamientos entre Israel y los grupos islamistas de Gaza y Cisjordania.

Lastimosamente el artículo en cuestión omite criticar las acciones de Hamas, de hecho, las veces que lo menciona es solamente para señalar alguna nota de las tantas que publica en su extensísimo documento, pero carece de una objetividad a la hora de mantener crítica únicamente hacia Israel, ejercicio que en realidad es sencillo de hacer incluso dentro del propio Israel.

Cabe recordar que de conformidad con el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, Israel tiene el derecho a la legítima defensa, en especial si se ven amenazados sus ciudadanos. Cualquier país o territorio en el caso de un ataque como el realizado por Hamas el 7 de octubre de 2023 habría respondido con determinación a esta grave violación de su espacio.

El proceso politizado en la CIJ por parte de Sudáfrica, con el respaldo de otros países como el caso de Belice, tiene como objetivo aislar a Israel y transformarlo en un Estado paria en el mundo. El gobierno sudafricano, en contravención de su propia historia de lucha por los derechos de poblaciones sensibles, ha politizado este conflicto al acusar a Israel con la intención de preservar sus alianzas geopolíticas actuales, sin importar el daño que ocasiona al hacer este tipo de acciones y a la carencia de una base jurídica determinante.

Esta politización del esquema global multilateral refleja los daños que se viven en el sistema internacional, donde se puede llevar y acusar constantemente en resoluciones políticas a un país como Israel, pero se carece de herramientas para condenar a países que violentan los DDHH de las mujeres o de las minorías o que se han convertido en amenazas para el mundo, como el caso de Corea del Norte.

Cualquier resolución para que sea duradera, debe reconocer el derecho de existencia del Estado de Israel en territorio seguro. Es por esto por lo que, mientras grupos radicales sean los que dirijan la vida de los palestinos, la posibilidad de una solución pacífica será técnicamente imposible y este tipo de resoluciones más que aportar a una solución la tergiversan y dañan.

Es lamentable que se utilicen los espacios de debate y de discusión constructiva como la prensa o la academia en el desarrollo de notas extensas y altísimamente parcializadas, que ignoran adrede el contexto histórico, omiten las responsabilidades de grupos radicales y rechazan el derecho de autodefensa que tiene Israel justificando cualquier acción en su contra.

Por último, la acusación de Sudáfrica y otros países que la apoyan frente a la CIJ es únicamente un acto político con mucho ruido y pocos efectos beneficioso para los palestinos. Israel sigue comprometido con la seguridad de sus ciudadanos, indiferentes de su credo u origen y con la búsqueda de una solución negociada, para que esto sea efectivo, es necesario que la comunidad internacional tome una posición equilibrada y responsable que obligue a las partes a tomar en serio las medidas y no a explotar espacios constructivos con mensajes sesgados que solamente perpetúan el conflicto y mantienen en sus puestos a líderes y académicos que lucran de este tipo de situaciones, no se puede obtener resultados distintos, si se sigue aplicando el mismo tipo de antídoto.

Referencias

Dershowitz, A. (2003). The case for Israel. Dublin ULJ, 25, 44.

Fantini, C. (2021). Escudos humanos: el arma secreta de Hamas. Perfil. https://noticias.perfil.com/noticias/internacionales/escudos-humanos-el-arma-secreta-de-hamas.phtml

Foundation for Defense of Democracies (2024). Israeli Police Seize Hamas Terror Funds in Eastern Jerusalem. https://www.fdd.org/analysis/2024/09/24/israeli-police-seize-hamas-terror-funds-in-eastern-jerusalem/

Graham, E. (2024). Starvation in Gaza likely key to UK legal advice on war crimes. The Guardian. https://www.theguardian.com/world/2024/mar/30/scale-of-suffering-in-gaza-will-make-accusations-of-war-crimes-harder-to-deny

Neuer, H. (s.f.). The Demonization of Israel at the United Nations in Europe Focus on the Human Rights Council and Specialized Agencies. JCPA. https://jcpa.org/overview_palestinian_manipulation/demonization_of_israel_at_the_united_nations/

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