Desde la profundización de la crisis sanitaria del COVID 19, en CLC Comunicación hemos estado colaborando de forma virtual con nuestros clientes, adaptándonos a estos tiempos sin precedentes, los cuales han modificado nuestros usos cotidianos, tanto en el ámbito personal como profesional. En este artículo, queremos proponer varios elementos relevantes sobre el impacto en la industria de las comunicaciones y cómo las empresas deben responder en este tiempo incierto en esta área.
Impacto en la asesoría de las comunicaciones Esta pandemia ya ha generado la suspensión o posposición de grandes eventos que relacionaban patrocinios, lanzamientos de productos y otras diversas actividades de marketing y publicidad de marcas, generando una profunda desaceleración de nuevas oportunidades de negocio.
Este es un momento crucial para quienes asesoramos en comunicación, generemos valor para que las marcas puedan diferenciarse, relacionarse con sus stakeholders y encontrar su rol en la transición a la “nueva normalidad” que se vislumbra. A continuación, destaco varios consejos útiles para las empresas y organizaciones, los cuales permiten afrontar la crisis sanitaria y económica desde una perspectiva de comunicación empresarial:
Monitoreo En una crisis en curso, mantenerse al día con la información más precisa y pertinente es clave. El Poder Ejecutivo y la Asamblea Legislativa están proponiendo y aprobando leyes, política pública, decretos, reglamentos, directrices y reinterpretando su ámbito de acción de una forma vertiginosa. Muchas de estas medidas implican cambios en la forma de hacer empresa y algunas propuestas significarán afectación para un sector productivo en particular.
Para afrontar estos cambios acelerados se necesita información, debidamente corroborada, la cual permite anticipar los cambios con antelación y tener oportunidades para transmitir información hacia los centros de toma de decisión, para que las medidas planteadas puedan modificarse en vista de la afectación que pueden tener en las áreas de la economía, por medio de efectos secundarios y desincentivos para producir. En este sentido, es preciso contar con un sistema de actualización diaria de los cambios normativos para tomar decisiones cruciales para la empresa.
Relaciones con los medios de comunicación. Todas las empresas del país están expuestas a diversas situaciones por las cuáles puede ser necesario que establezcan diálogos con la prensa. En este sentido, es necesario que los mensajes se construyan en los términos adecuados y con la empatía acorde con los tiempos. Además del mensaje, es crucial contar con voceros debidamente capacitados para dialogar con los medios de comunicación de manera asertiva y de acuerde a la coyuntura. El reto también consiste en posicionar otros temas. Recientemente hicimos una medición para un cliente y pudimos observar que cerca del 80% del contenido noticioso está centrado en los temas relacionados al COVID 19. Esto implica desarrollar nuevas narrativas, más allá de cómo los procedimientos de su empresa están afectando tanto al personal como a los clientes. Este abordaje casi monotemático irá cediendo poco a poco y también habrá que estar listos para aprovechar el espacio.
Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Es un buen momento para que el storytelling alrededor de nuestro “propósito social” que debe orientar la RSC se vea apuntalado por nuestro storydoing, es decir, las acciones concretas en esta coyuntura particular que acompañan nuestra narrativa.
Es preciso hacer y comunicar bien la forma en la que la empresa está mejorando la sociedad y su entorno de trabajo. Nuestras audiencias exigen y esperan que demos un paso al frente, vinculando su servicio o producto a la mejora de la sociedad en general. Las organizaciones deben asesorarse para que sus acciones estratégicas en esta crisis redunden en el futuro en marcas más confiables, transparentes, fuertes y con una mayor lealtad del cliente.
Mantener el diálogo. Ante la incertidumbre empresarial y laboral, es esencial mantener una comunicación abierta con las personas que trabajan en las organizaciones, con los clientes y con las comunidades en las que se realizan las actividades empresariales. De manera permanente se deben escuchar y enviar mensajes a todas las partes interesadas, tanto externas como internas.
Seguir adelante. Es probable que esta crisis COVID-19 tenga un impacto duradero en la forma en cómo funcionan las empresas y la manera en la que estas establezcan diálogos con sus stakeholders. La capacidad de adaptación y de innovación serán claves para garantizar el éxito en el futuro que hoy se torna incierto. Lo que sí sabemos es que nuestro país y la región lograrán superar esta crisis y que saldremos adelante.
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