Por Karla María Pérez González, periodista y editora.
Taipéi, 30 ene (elmundo.cr) – La presidenta de Taiwán Tsai Ing-wen mantuvo este lunes una llamada telefónica con el recién electo mandatario de la República Checa, Petr Pavel, un gesto diplomático que podría disgustar a China.
Según informaron a la prensa las oficinas de ambas presidencias, los mandatarios “subrayaron los valores comunes de libertad, democracia y derechos humanos de sus países” en los 15 minutos que duró la llamada.
Además, Petrl Pavel añadió que espera poder reunirse con Tsai durante su Administración.
El exjefe del ejército checo y alto cargo de la OTAN escribió en su perfil oficial de Twitter que los dos países “comparten los valores de libertad, democracia y derechos humanos”.
“Hoy hablé con la presidenta de Taiwán Tsai Ing-wen. Le agradecí sus felicitaciones y le aseguré que Taiwán y la República Checa comparten los valores de libertad, democracia y derechos humanos. Acordamos fortalecer nuestras relaciones”, agregó el presidente checo.
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores chino declaró que “la parte china se opone a que los países con los que mantiene lazos diplomáticos participen en cualquier forma de intercambio oficial con las autoridades de Taiwán. El presidente electo checo Pavel dijo abiertamente durante el periodo electoral que debía respetarse el principio de ‘una sola China’”.
No es habitual hacer públicas las interacciones de alto nivel con Taiwán, para evitar tensiones con China, por lo que este singular episodio va demostrando los posicionamientos del nuevo líder checo.
Pavel ganó las presidenciales de República Checa el sábado anterior y asumirá el cargo a partir del 9 de marzo próximo.
Se trata de un general retirado, de 61 años, con una postura “claramente prooccidental”, señaló un reporte especializado de Euronews.
Su antecesor, Milos Zeman, fue considerado por muchos como cercano a China.
