Madrid, 12 oct (elmundo.cr) – El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, fue abucheado durante los actos del Día de la Fiesta Nacional.
Después de que sonara el himno de España, momento que el público ha respetado y se ha mantenido en un solemne silencio, los asistentes han vuelto a romper en gritos de “dimisión” o “Pedro Sánchez, hijo de puta”, “cobarde” o “fuera, fuera”.
El público congregado en la cita, que desde primera hora de la mañana esperaba que diera comienzo el desfile, también tenía ganas de expresar su disconformidad con Sánchez.
Así, cuando han empezado a llegar ministros los gritos de “fuera, fuera”, no paraban de sucederse. Lo contrario sucedía con la llegada, veinte minutos antes de las once de la mañana, de la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien despertaba aplausos y gritos de “guapa”, incluso, de algún enfervorecido. Ayuso ha respondido acercándose al público para saludar.
Los Reyes Don Felipe y Doña Letizia eran aclamados por el público durante el recorrido en Rolls. A su llegada a la plaza de Lima, se daba una situación anómala, pues los Reyes, informados por su jefe de Protocolo, se veían obligados a permanecer en el coche a la espera de Sánchez, que apareció tres minutos después de la hora prevista.
Don Felipe pasó revista a las tropas con los gritos a Sánchez de fondo. Después, el Rey se colocó en la tribuna de honor junto a la Reina Letizia y la Infanta Sofía, ataviada con un vestido azul. Tras rendir homenaje a los caídos, comenzó la parada militar.
El desfile del 12 de octubre recuperó este año esplendor tras las restricciones impuestas en las dos últimas ediciones por la pandemia. Participaron más de 4.000 militares, 150 vehículos y 84 aeronaves arropados por miles de ciudadanos que desde primera hora de la mañana han inundado con banderas de España el paseo de la Castellana.
Los gritos y abucheos a Pedro Sánchez por parte del público se repitieron al término del desfile, cuando las autoridades abandonaron el lugar, camino del palacio Real donde se celebra la tradicional recepción por parte de los Reyes.