París, 24 abr (elmundo.cr) – Los obreros que trabajaban en la restauración de la aguja de la catedral de Notre Dame reconocieron que fumaban en los andamios.
La policía francesa encontró siete colillas de cigarrillos en los andamios de restauración donde surgió el fuego que devastó parte de la cubierta de la catedral el pasado día 15, reveló el semanario Le Canard Enchaîné.
Pese a ello, los investigadores apuestan más por la hipótesis de que el incendio se debió a un cortocircuito.
Esto debido a que existían diversas irregularidades con la instalación eléctrica, en concreto, en el tendido para alimentar un juego de campanas que se encontraba en la aguja y otro bajo la misma, y que recorría el envigado de madera de la catedral.
Ese dispositivo fue autorizado, de forma provisional, en 2012 a petición de los clérigos de Notre Dame durante las obras de renovación de los campanarios principales, con el objetivo de electrificar esas campanas para que pudieran sustituirlas.
Sin embargo, siempre según Le Canard, nunca fue sustituido, seguía utilizándose y sobre él se instaló el andamiaje para la restauración de la aguja.