Berlín, 23 feb (dpa) – La tendencia de muchos padres en Alemania de no vacunar a sus hijos se convirtió hoy de nuevo en objeto de debate tras la muerte de un niño pequeño por sarampión en un hospital de Berlín.
El ministro de Sanidad alemán, Hermann Gröhe, reconoció hoy que ya no se descarta por completo establecer como vacuna obligatoria la del sarampión, una enfermedad altamente contagiosa.
Sin embargo, dejó claro que el establecimiento de vacunas obligatorias deberá acordarse de manera conjunta con médicos, guarderías, escuelas y otro tipo de organismos responsables. “La vacunación obligatoria no es un tabú, pero no se ha fijado aún”, indicó.
El debate se abrió después de que se originara un brote de sarampión en Berlín en octubre. Desde entonces hasta hoy se han registrado más de 570 casos de personas infectadas por este virus, que le costó la vida a un niño de un año y medio, informaron hoy las autoridades sanitarias de la capital alemana.
El borrador de la nueva ley de prevención establece que los padres tengan que presentar un justificante de haber recibido asesoramiento en el ámbito de la vacunación para poder registrar a sus hijos en una guardería. “Se trata de intentar acercarse a todos aquellos que se dedican a extender el pánico hacia las vacunas”, explicó Gröhe.
Los expertos internacionales consideran la vacuna del sarampión como segura. El riesgo de la vacuna es mínimo y es mucho menos que el riesgo que supone padecer la enfermedad. Las autoridades sanitarias alemanas llevan tiempo alertando de que aquellos que no permiten que se vacune a sus hijos ponen en peligro también a las guarderías o las escuelas y actúan de manera irresponsable.
Dentro de este debate sobre la posibilidad de establecer como obligatorias ciertas vacunas, sigue prevaleciendo el deseo de que los padres sean los últimos en decidir si quieren o no vacunar a sus hijos, indicó el experto en Sanidad del partido de La Izquierda, Harald Weinberg, al diario “Saarbrücker Zeitung”.
Los pediatras sostienen como “irreal” la posibilidad de establecer la obligatoriedad de las vacunas. “Una vacunación obligatoria general no se implantará debido a la oposición que existe en la población”, aseguró el presidente de la Federación de Pediatras, Wolfram Hartmann, al rotativo “Die Welt”.
Sin embargo, en su opinión debería solicitarse a todos los niños que presenten un carnet de vacunación antes de poder entrar en una guardería o escuela estatal.