Panamá, 14 mar (elmundo.cr) – De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), América Latina y el Caribe albergan una rica base de recursos genéticos que debe preservarse para que el mundo alcance los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Tito Díaz, Coordinador Subregional de la FAO para Mesoamérica indicó que “con la erosión de la biodiversidad, la humanidad pierde el potencial de adaptar los ecosistemas a nuevos retos como el crecimiento de la población y el cambio climático”.
Es así que para alcanzar la seguridad alimentaria y nutricional para todos se debe mantener la biodiversidad, señaló Díaz durante la consulta regional del Estado de la Biodiversidad para la Alimentación y la Agricultura en América Latina y el Caribe.
En Panamá se dieron cita más de 20 representantes de gobiernos de la región como parte de un proceso de evaluación global del uso sostenible y la conservación de la biodiversidad para la seguridad alimentaria y nutricional.
América Latina y el Caribe albergan la mayor base de recursos genéticos para especies cultivadas y consumidas en todo el mundo, como el maíz, la papa, yuca, camote, tomate, frijol, maní y calabaza.
Según la FAO, la región tiene además una gran cantidad de alimentos silvestres, plantas comestibles y especies animales no tradicionales y subutilizadas, y cuenta con una gran diversidad de ecosistemas, sistemas productivos y conocimiento indígena sobre el mantenimiento y la utilización de la biodiversidad para la alimentación y la agricultura.
La consulta regional dará algunas luces para el próximo informe del Estado Mundial de la Biodiversidad para la Alimentación y la Agricultura, que se presentará en el 2017.
Irene Hoffmann, Secretaria de la Comisión de Recursos Genéticos para la Alimentación y la Agricultura de la FAO afirmó que “informes anteriores han analizado recursos genéticos animales, forestales y acuáticos; la biodiversidad de uso directo por parte de los seres humanos”.
“Este informe es diferente: se concentrará en la diversidad de micro-organismos, invertebrados, anfibios, reptiles, aves, plantas y mamíferos que se encuentran en los sistemas de producción de alimentos y a menudo contribuyen a importantes servicios que apoyan la producción agrícola”, agregó.
Para Hoffman “el informe va a mejorar nuestra comprensión del tesoro escondido que representa la biodiversidad que apoya la agricultura, la ganadería, la silvicultura y la pesca”.
Durante la reciente Conferencia Regional, la FAO estableció como prioridad en sus iniciativas regionales ayudar a los países a preservar sus recursos naturales, combatir el cambio climático y manejar el riesgo de desastres.
La FAO promoverá acciones para apoyar la transición del sector agrícola de la región hacia el desarrollo sostenible, la pesca sostenible, el manejo integral de la región costera, el uso sostenible de recursos naturales y la agricultura climáticamente inteligente.
La iniciativa regional promoverá las políticas agro-ambientales y agro-ecológicas, fortaleciendo la conservación de los recursos naturales y rescatando cultivos y alimentos tradicionales y subutilizados.
La FAO explicó que siete de los veinticinco lugares del mundo con altas concentraciones de especies endémicas se encuentran en América Latina y el Caribe. Sin embargo, en la región se presenta un proceso de erosión fito y zoo-genética, por la ampliación de la frontera agrícola y la proliferación del uso de cada vez pocas especies.
“Las especies nativas y las variedades tradicionales son abandonadas y reemplazadas por la monocultura y la ganadería extensiva, lo que ha hecho que la dieta de las poblaciones locales se torna cada vez más homogénea y menos variada”, concluyó Diaz.