Ministro alemán ve crisis del gas como una oportunidad para renovables

X (Twitter)
Facebook
LinkedIn
WhatsApp
El ministro de Economía y Protección del Clima alemán, Robert Habeck, en conferencia de prensa con la titular de Protección del Clima austriaca, Leonore Gewessler, en Viena. Foto: Tobias Steinmaurer/APA/dpa
El ministro de Economía y Protección del Clima alemán, Robert Habeck, en conferencia de prensa con la titular de Protección del Clima austriaca, Leonore Gewessler, en Viena. Foto: Tobias Steinmaurer/APA/dpa

El ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck, sostuvo hoy que la actual crisis del gas también encierra una gran oportunidad en el camino hacia la transición energética.

“Ahora hay una nueva alianza entre la protección del clima y la seguridad energética”, dijo en Viena Habeck, del partido Los Verdes, en referencia a la prevista expansión acelerada de las energías renovables.

Aunque en la actualidad se hable de cuestiones como la ampliación de las terminales de gas natural licuado, se están produciendo avances estructuralmente importantes, añadió.

“En estos momentos se están produciendo poderosos movimientos bajo la superficie que, si superamos este periodo, harán que este continente, Austria y Alemania, sean cada vez más fuertes”, dijo Habeck.

Durante la visita del también vicecanciller alemán a Austria, ambos países se comprometieron a estrechar la cooperación energética en una declaración conjunta.

Entre otras cosas, los dos estados federados austriacos de Tirol y Vorarlberg están conectados a la red de gas alemana, mientras que a su vez Austria tiene grandes instalaciones de almacenamiento de gas que ofrecer.

La ministra austriaca de Energía y Protección del Clima, Leonore Gewessler, también del Partido Verde, advirtió de que los europeos no deben dejarse dividir ante la actual situación, como pretendía el presidente ruso, Vladímir Putin.

Habeck subrayó la necesidad de actuar a nivel europeo. El reglamento europeo de emergencia del gas prevé la protección de las infraestructuras críticas y de los consumidores, pero no de las empresas y la industria.

Esto solo tiene sentido en el caso de una interrupción a corto plazo, dijo Habeck. “Pero ese no es el escenario que tenemos ahora”. Por eso consideró necesario prever las consecuencias de una interrupción a largo plazo de la producción industrial.

La crisis actual recuerda en un cuestión fundamental a la financiera de 2008: que todas las advertencias fueron ignoradas, indicó Habeck.

La decisión de construir el gasoducto Nord Stream 2 del Mar Báltico se tomó en 2015, un año después de la ocupación rusa de Crimea, subrayó, y sentenció: Los países optaron por no posicionarse con visión a largo plazo, sino que tomaron gustosamente la ventaja fácil y barata.