Managua, 18 ene (VOA) – Los cafetaleros de Nicaragua están preocupados por una baja significativa en el arranque de las exportaciones que corresponden al ciclo 2020–2021, principalmente por el impacto de los huracanes Eta e Iota, la crisis económica y las medidas recaudatorias del estado.
La cosecha cafetalera 2019-2020, que terminó en septiembre del año pasado, cerró con buenos resultados logrando un ingreso adicional superior a los 12 millones de dólares con respecto a la anterior.
Guillermo Jacoby, presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua, explicó a la Voz de América que desde el inicio del año cafetalero en octubre hasta la fecha, el rubro ha experimentado una caída del 40% en el volumen de sus exportaciones y del 34% en la generación de divisas en comparación con 2019-2020.
Es decir, en el primer trimestre el sector exportó 10,4 millones de kilogramos, que representan un total de 27,6 millones de dólares, muy por debajo del arranque anterior, cuando el sector logró vender en el mercado internacional 17,5 millones de kilos, para un ingreso de 42,4 millones de dólares.
Sin embargo, el sector sigue haciendo el recuento de los daños.
“(Los huracanes) Eta y Iota van a afectar mayormente en el año 2021, porque lo que pasa es que afectó el grano que estaba en producción. Los vientos hicieron que mucho grano se perdiera, o que se perdiera en grano verde, pero aún no sabemos el estimado de cuánto”, especificó Jacoby.
El sector cafetalero ha sido uno de los más afectados desde la crisis sociopolítica de Nicaragua con la restricción del crédito, el aumento de los insumos, la reforma fiscal, el aumento de la inseguridad y ahora los daños causados por los huracanes.
Aura Lila Sevilla Kuan, presidenta de la Alianza Nacional de Cafetaleros de Nicaragua, dijo a la VOA que, pese a todos estos problemas, los productores esperan lograr una producción superior a los tres millones de quintales de café oro.
“Ahorita los primeros rendimientos que tenemos son de frutos a pergaminos, ahí estamos bastante bien en los rendimientos. Nos falta la maduración de las zonas altas, que está costando que madure”, dijo Sevilla.
El café es el tercer rubro de exportación en Nicaragua, únicamente superado por el oro y la carne. Además, el sector genera unos 300.000 empleos en época de cosecha, por lo que la producción resulta clave para el país.
Entre octubre del 2019 y septiembre del 2020, el ciclo cafetalero dejó en ingresos 446,71 millones de dólares por envíos del grano, un monto levemente beneficiado por el precio internacional.
Álvaro Vargas, presidente de la Asociación de productores Agropecuarios de Nicaragua, explicó que el ciclo 2019-2020 se vio afectado por la reforma tributaria impuesta por el gobierno, que incrementó los costos de producción.
En cuanto a productos agrícolas se refiere, llegó hasta un 35% lo que puso en dificultades a la producción cafetalera y la tendencia es una baja en las exportaciones.