REPORTAJE
Por Beatriz Juez (dpa)
Washington, 3 ago (dpa) – Nadie encarna el sueño americano mejor que el chef español José Andrés, al que candidato republicano Donald Trump ha demandado por diez millones de dólares.
Millones de inmigrantes en Estados Unidos persiguen el sueño americano, la creencia de que a través del trabajo duro y la perseverancia, uno puede triunfar en Estados Unidos independientemente de su origen o clase social. Como José Andrés, muchos de estos inmigrantes, sobre todo en la pujante comunidad hispana, se han sentido ofendidos por los comentarios xenófobos contra los mexicanos del magnate.
Trump, que lidera las encuestas de intención de voto en las primarias republicanas, demandó a José Andrés. Lo hizo después de que el asturiano, en respuesta a las declaraciones de Trump contra los inmigrantes, rompiera el acuerdo para abrir un restaurante en un lujoso hotel que el candidato planea inaugurar en Washington.
El multimillonario anunció el 16 de junio su candidatura a las primarias republicanas en un polémico discurso marcado por comentarios xenófobos contra los inmigrantes mexicanos indocumentados, a los que Trump calificó de narcotraficantes, delincuentes y violadores.
“Como orgulloso inmigrante español, recientemente nacionalizado, creo firmemente en el respeto que cada ser humano se merece independientemente de su situación migratoria”, dijo José Andrés justificando su decisión de romper su acuerdo con Trump.
“La demanda no es una sorpresa y no tiene fundamento”, señaló el cocinero tras conocer la demanda multimillonaria interpuesta contra él por el candidato republicano. “Tenemos la intención de gestionar un negocio de éxito que celebre y dé la bienvenida a todas las personas y culturas del mundo”, añadió el cocinero a través un comunicado.
Tras los insultos de Trump, José Andres considera imposible seguir adelante con el proyecto de abrir un restaurante español en el hotel Trump International. El magnate inaugurará el próximo año un hotel de lujo en el Old Post Office Pavilion, la antigua sede de correos, en la avenida Pensilvania, cerca de la Casa Blanca.
La polémica, sin embargo, ha disparado la popularidad de Trump entre las bases republicanas. Con un 22,2 por ciento de intención de voto, el magnate parte como favorito en unas concurridas primarias republicanas, por delante del gobernador de Wisconsin Scott Walker (12,7 por ciento) y del ex gobernador de Florida Jeb Bush (12,2 por ciento), según la web RealClearPolitics.
Asturiano de nacimiento y recientemente nacionalidado estadounidense, José Ramón Andrés Puerta (Mieres, 1969) llegó a Estados Unidos a los 21 años con una oferta de trabajo y una maleta llena de talento y ambición para trabajar como cocinero en el restaurante El Dorado Petit en Nueva York.
Dos años después se trasladó a Washington donde abrió en 1993 el restaurante Jaleo, con el que popularizó las tapas en el país de las hamburguesas. José Andrés, que ha sacado al mercado una línea de productos gourmet españoles, también tiene un restaurante de cocina de autor (minibar), otro de cocina mexicana (Oyamel), de griega-turca-libanesa (Zaytinya), puertorriqueña (Mi Casa) y de cocina de fusión (China Poblano y China Chilcano), entre otros.
Veinticuatro años después de emigrar a Estados Unidos, este chef español, trabajador infatigable y con una personalidad arrolladora, ha logrado crear un imperio gastronómico, el ThinkFoodGroup, en la tierra que lo acogió y convertirse en uno de sus cocineros estrella.
El chef español no sólo se mueve con soltura entre los fogones, sino también en los platós de televisión, donde ha tenido programas de cocina, y entre actores de Hollywood, famosos y políticos. Y está detrás de proyectos humanitarios como la World Central Kitchen y la Alianza Global para Cocinas Limpias.
José Andrés – que ha recibido el prestigioso premio James Beard, el “Oscar” culinario de Estados Unidos y al que la revista Time incluyó en 2012 en su lista de personajes más influyentes del año – ha cocinado para Barack Obama y sus invitados en la Casa Blanca.
El año pasado, este cocinero, que no acabó el instituto y se educó gracias a “la cocina de la vida”, fue el encargado de dar el discurso de graduación de la Universidad George Washington. José Andrés no sólo celebró su “sueño americano” sino que invitó a los alumnos a ir más allá y lograr que su éxito personal tenga un impacto positivo en la vida de los demás. “Ese es el nuevo sueño americano”, proclamó entonces.
