Quito, 11 ene (VOA) – La capital de Ecuador, Quito, mostraba el miércoles un ambiente menos tenso después de que el día anterior hombres armados tomaran la sede del canal TC Televisión en Guayaquil y el presidente Daniel Noboa declarara al país en estado de “conflicto armado interno”.
“Hoy ha sido un día normal, estamos laborando como si nada hubiera sucedido”, dijo a la Voz de América Martha Jami, representante del mercado La Mena 2, al sur de Quito.
Jami agradeció a las fuerzas policiales por las acciones para restablecer la seguridad, pero también relató que tras la aparición en redes sociales de los videos sobre los actos de violencia, tomaron la decisión de cerrar el mercado.
Un amplio operativo conjunto de efectivos policiales y del Ejército emprendió acciones que llevaron a la detención de al menos 70 personas, que han sido acusadas de actos de terrorismo, indicaron las autoridades.
El teniente de la Policía Nacional Matías Valencia, también en la zona sur, dijo a la VOA que el de las últimas 24 horas han sido “un trabajo complicado” los operativos ordenados por el gobierno de Daniel Noboa desde la declaración de “conflicto armado interno”.
Así mismo, señaló que algunas personas “sospechosas” han tratado de “aprovecharse del momento” para tratar de cometer delitos.
La colaboración de la ciudadanía, insistió Valencia, ha servido para mantener la zona sur en relativa calma.
Ecuador ha vivido un particular clima de violencia en los últimos meses, que se agudizó desde el lunes con los secuestros de guardias penitenciarios y funcionarios administrativos por parte de reos que se amotinaron en varias cárceles del país.
En tanto, en las cercanías del Palacio de Gobierno, el ciudadano Domingo Peñafiel explicó que la situación en la capital no llegó a mayores como ocurrió en Guayaquil, por ejemplo. Aun así, dijo, “hay que estar con cuidado pues con esto que estamos, es muy delicado hablar”.
Desde un puesto de venta, Georgina Yépez dijo que hoy se arriesgó a salir debido al temor de volver a la medida de encierro que tomaron por precaución la jornada anterior, cuando presenció frente a su casa el ataque a un vecino por parte de dos personas en una motocicleta.
“La barriga no espera, porque no teníamos qué comer”, dijo la mujer sobre su decisión de salir a la calle tras los altercados.
Al final de la tarde, en conferencia de prensa, Jaime Vela, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, dijo que el amplio operativo dejó hasta el momento 329 detenidos y cinco sospechosos abatidos.
