Karlsruhe (Alemania), 12 dic (dpa) – La Fiscalía Federal de Alemania presentó hoy cargos contra 27 presuntos miembros del grupo conocido como “Reichsbürger” (Ciudadanos del Reich), a los que acusa de pertenencia y apoyo a una organización terrorista.
El proceso se tramitará ante los tribunales regionales superiores de Fráncfort, Múnich y Stuttgart. Estos deben decidir si admiten los cargos y programar un juicio en consecuencia.
La acusación llega casi un año después de la operación policial a gran escala conducida contra el grupo por sus supuestos planes para derrocar al gobierno alemán, en la que 25 personas fueron detenidas en varias regiones del país, además de en Austria e Italia.
Entre ellas se encontraban Birgit Malsack-Winkemann, exdiputada en el Bundestag (Parlamento) del partido Alternativa para Alemania, una jueza de Berlín y un soldado en activo del Mando de Fuerzas Especiales (KSK) de las Fuerzas Armadas alemanas.
El empresario Heinrich XIII, conocido como Príncipe Reuss de Greiz, está considerado uno de los cabecillas del grupo. Se cree que este hombre de negocios, de 71 años, ejercía como presidente del comité central del grupo, con el objetivo de convertirse en un “futuro jefe de Estado” en caso de golpe de Estado.
Según sus planes, un gobierno de transición debía negociar el nuevo orden estatal en Alemania con las potencias aliadas vencedoras de la Segunda Guerra Mundial. “Desde el punto de vista del grupo, el punto central de contacto para estas negociaciones es actualmente la Federación Rusa, en exclusiva”, explicó la Fiscalía.
A su vez, continuó la Fiscalía, un “brazo militar” debía también “eliminar” el Estado constitucional democrático a nivel de municipios, distritos y autoridades locales. Soldados y policías eran el objetivo específico del golpe supuestamente frustrado en diciembre.
Según la investigación, otro plan consistía en entrar por la fuerza en el Bundestag alemán con un pequeño grupo armado.
Los “Ciudadanos del Reich” son personas que no reconocen a la República Federal de Alemania ni sus estructuras democráticas. La Oficina para la Protección de la Constitución, el servicio interior de inteligencia, considera que en 2022 contaba con 23.000 seguidores (2021: 21.000).