Roma, 16 (dpa) – La esperada encíclica sobre medio ambiente y cambio climático del papa Francisco se filtró tres días antes de lo previsto, después de que el semanario italiano “L’Espresso” diera a conocer la noche del lunes un borrador del texto “Laudato si”, cuya publicación provocó hoy una fuerte reacción por parte del Vaticano.
El portavoz del papa, Federico Lombardi, dijo que el documento de 192 páginas publicado en el sitio de Internet del semanario no es la versión final de la encíclica, sino solo un borrador.
Lombardi instó a que se respetara la fecha de publicación según lo programado. La primera encíclica escrita en su totalidad por Francisco se dará a conocer oficialmente el jueves.
En tanto, el Vaticano retiró la acreditación al periodista que publicó la encíclica con antelación, según informó Radio Vaticano. La publicación de este borrador y la ruptura del embargo estipulado causó “gran inconveniente para muchos colegas periodistas” y una interrupción sustancial de los servicios en la oficina de prensa del Vaticano, citó la radio a Lombardi.
Aún no está claro de qué manera accedió al borrador el semanario, pero se especula que opositores al papa Francisco en el Vaticano podrían haber entregado el texto de forma deliberada a los medios de comunicación con el fin de perjudicar al sumo pontífice de la Iglesia católica para impedir la divulgación de su mensaje.
La nueva encíclica del papa es una señal importante para la protección del medio ambiente. “Si el líder de más de mil millones de católicos centra su encíclica en la integridad de la creación y, en particular, en la protección de la atmósfera terrestre, es obviamente una señal fuerte”, dijo el director del Instituto alemán para la Investigación del Impacto Climático en Potsdam, Hans Joachim Schellnhuber a la agencia dpa.
El papa toma muy en serio los descubrimientos científicos y reconoce un desafío ético en ello, dijo Schellnhuber, quien el jueves estará en la presentación de la encíclica en el Vaticano.
“En última instancia, el cambio climático es también una cuestión de justicia: quemamos combustibles fósiles y emitimos toneladas de gases de efecto invernadero para nuestro bienestar aquí y ahora, lo que conlleva a riesgos tales como climas extremos y el aumento de los niveles del mar, entre otros”, agrega el ciéntifico. Sobre todo los países más pobres del sur sufren debido a esta situación, recalca Schellnhuber.
