Caracas, 30 mar (dpa) – El ex presidente del gobierno español Felipe González dijo hoy que no pretende sustituir las instituciones de Venezuela ni desestabilizar al gobierno, al asumir la defensa legal de los dirigentes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma.
“No pretendo sustituir a ninguna institución”, señaló en una entrevista con la emisora “Unión Radio”, en la que además consideró insuficientes las gestiones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) para superar la coyuntura política venezolana.
El ex gobernante español espera sumarse a la defensa de López y Ledezma, acusados de instigación de las protestas contra el gobierno del año pasado y conspiración, respectivamente.
González fue acusado por el presidente Nicolás Maduro de estar aliado con opositores que intentan derrocarlo, aunque no aclaró si le impedirán el ingreso al país en sus labores de defensor legal.
Al respecto, González indicó que no espera ser expulsado de Venezuela.
“Un gobierno en el uso de su soberanía puede prohibirle la entrada a alguna persona, pero no lo espero. Acá, en España, han estado venezolanos y no se les ha prohibido la entrada”, aseveró.
Agregó que en tal caso el gobierno tendría que informarle oficialmente la prohibición.
“La expulsión o no entrada es una facultad del gobierno, tendrá que hacerlo formalmente de acuerdo a la legislación actual”, agregó.
Asimismo, señaló que con sus gestiones legales no tiene intenciones de desestabilizar al gobierno de Maduro, ni irrespetar las instituciones venezolanas.
Dijo que los abogados de López han intentado sin éxito presentar pruebas en el curso del juicio.
“En Venezuela hay presos por ser políticos. Mi esfuerzo es contribuir a la libertad de los presos políticos en Venezuela. El abogado de la defensa de López intenta presentar pruebas que no se admiten a trámite. Hay muchas violaciones al debido proceso de López, el derecho a la defensa es una de ellas”, señaló.
López tiene más de un año preso en la cárcel militar de Ramo Verde, en el vecino estado de Miranda, y enfrenta causas que prevén penas de más de 10 años de cárcel.
El vicepresidente de la comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional (Congreso), el diputado oficialista Saúl Ortega, afirmó que si González pretende venir a Venezuela a “interferir” puede ser expulsado del país.
“Cualquier persona puede ingresar al país, pero una persona como ésta, que quiere ingresar como un procónsul a interferir, lo menos que puede hacer un gobierno serio es ponerlo en un avión y enviarlo a su casa”, aseveró.
Agregó que González viene a defender a “victimarios”, insistiendo en la tesis del gobierno que López, Ledezma y la ex diputada María Corina Machado son responsables de las 43 muertes dejadas por las protestas contra el gobierno entre febrero y mayo de 2014.
Señaló que “como persona” González es libre de ingresar a Venezuela, pero si viene en “funciones políticas” no puede ser recibido.
