Florencia, 10 nov (dpa) – El papa Francisco denunció hoy en la ciudad industrial de Prato, en Italia, el trato abusivo que reciben los trabajadores locales de la industria textil.
En un discurso ante la catedral de la ciudad, el pontífice de la Iglesia católica recordó a los siete trabajadores chinos que, en 2013, perdieron la vida en un incendio en la fábrica donde trabajaban.
“La explotación y las condiciones de vida inhumanas son una tragedia, y eso no es un trabajo decente”, declaró el papa.
La ciudad de Prato, situada a unos 25 kilómetros de Florencia, es uno de los centros neurálgicos de la industria textil italiana y tiene una alta tasa de trabajadores extranjeros.
De los 190.000 habitantes de la ciudad, unos 35.000 son de origen chino y en su gran mayoría trabajan en la industrial textil.
El papa quiso recordar que los cinco hombres y las dos mujeres que murieron en aquel incendio vivían en el mismo taller en el que trabajaban.
Desde Prato, el pontífice viajó a Florencia en helicóptero, donde hablará en la Quinta Conferencia Nacional de la Iglesia italiana, a la que asistirán unos 2.500 delegados de todas las diócesis italianas.
Por la tarde, el papa oficiará una misa en el estadio del Florencia y por la noche volverá al Vaticano. Es el décimoprimer viaje del papa Francisco dentro de Italia.
