Washington, 25 may (VOA) – La Casa Blanca dijo el domingo que prohibirá el ingreso a Estados Unidos a la mayoría de extranjeros que hayan estado en Brasil en las últimas dos semanas, dos días después de que el país sudamericano se convirtiera en el segundo mayor epicentro de la pandemia de coronavirus.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, afirmó que las nuevas restricciones ayudarían a evitar que ciudadanos extranjeros empeoren la situación sanitaria de Estados Unidos, pero que no se aplicarían al flujo de comercio entre los dos países.
El asesor de Seguridad Nacional, Robert O’Brien, afirmó el domingo por la mañana en el programa “Face the Nation” de la cadena CBS que esperaba que la medida sobre Brasil pueda ser reconsiderada en algún momento.
“Esperamos que sea temporal, pero debido a la situación en Brasil, vamos a tomar todas las medidas necesarias para proteger al pueblo estadounidense”, declaró.
Brasil superó el viernes las cifras de Rusia y se convirtió en el segundo epicentro global del coronavirus, solo sobrepasado por Estados Unidos, y ahora tiene más de 347.000 personas infectadas, dijo el Ministerio de Salud.
Tras el anuncio en Washington, un asesor de la presidencia en Brasilia explicó que la medida estadounidense seguía parámetros previamente establecidos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que estaba considerando imponer una prohibición de viajes desde Brasil.
“No quiero que haya personas que vengan e infecten a nuestros ciudadanos. Tampoco quiero que las personas allá se enfermen. Estamos ayudando a Brasil con ventiladores (…) Brasil está teniendo algunos problemas, no hay duda al respecto”, aseveró Trump a periodistas en la Casa Blanca.
O’Brien aseguró que Estados Unidos analizará individualmente eventuales restricciones sobre otros países del Hemisferio Sur.
En enero, Trump suspendió la entrada a Estados Unidos para la mayoría de los viajeros de China, el país de origen de la pandemia. A principios de marzo, impuso límites de viaje a las personas procedentes de Europa.
Las nuevas restricciones impiden el ingreso a la mayoría de los ciudadanos no estadounidenses que han visitado Brasil en los últimos 14 días. Quienes porten documentos de ciudadanía, parientes cercanos de ciudadanos estadounidenses y miembros de tripulantes de vuelos estarán eximidos de la medida.