Washington, 21 jun (dpa) – Cuatro días después del asesinato racista de nueve personas, cientos de fieles llenaron hoy el lugar donde ocurrió la matanza, la iglesia metodista afroamericana de Charleston, en el estado norteamericano de Carolina del Sur.
El primer servicio religioso desde los asesinatos se celebró rodeado de fuertes medias de seguridad. La congregación entonó himnos en recuerdo de las víctimas, mientras que el asiento del reverendo Clementa Pinckney, uno de los fallecidos, estaba cubierto de negro.
“Ningún demonio en el infierno o en la tierra puede cerrar las puertas de la iglesia de Dios”, proclamó ante la multitud el pastor Norvel Goff.
Fuera del templo, las iglesias de la ciudad hicieron sonar sus campanas en señal de solidaridad.
Dylann Roof, de 21 años, fue acusado el viernes de asesinar a nueve personas en la iglesia metodista durante una sesión de estudio de la Biblia. Las víctimas fueron seis mujeres y tres hombres, de entre 26 y 87 años. Cuatro de los fallecidos eran sacerdotes, entre ellos el reverendo Pinckney, de 41 años, quien además era senador estatal por los demócratas.
Los asesinatos revivieron los temores a ataques racistas entre la comunidad afroamericana, tras un año con varios casos de muertes de hombres desarmados negros a manos de policías blancos.
En tanto surgieron nuevos detalles sobre las supuestas opiniones de Roof que este habría vertido en una página web supuestamente registrada a su nombre. En ella habría fotografías de Roof sosteniendo una pistola y una bandera confederada, junto a varios símbolos racistas.
En el manifiesto que supuestamente escribió, Roof afirma que se decidió a atacar Charleston al tratarse de la ciudad más histórica de Carolina del Sur y debido a que tiene “la proporción más elevada de negros respecto a blancos en el país”.
Según las informaciones de la web publicadas en la prensa, Roof afirma que sus opiniones racistas se remontan al asesinato en 2012 del adolescente negro Trayvon Martin. Además, muestra su odio hacia los afroamericanos, hispanos y judíos y lamenta que nadie esté haciendo nada contra los grupos minoritarios.
“No tenemos ‘skinheads’, no hay un (Ku Klux Klan) real, nadie está haciendo nada, más allá de hablar en Internet. Bien, alguien tiene que tener el valor de llevar eso al mundo real, y creo que tengo que ser yo”, afirmaría Roof en la web, según el diario “The Post and Courier”.
Al parecer la web fue retirada a última hora del sábado y los detalles del manifiesto no pudieron verificarse de forma independiente.