Casi 2,9 millones de jóvenes carecen de formación laboral en Alemania

ARCHIVO - Un aprendiz en un taller metalúrgico de Alemania. Foto: Felix Kästle/dpa

El número de jóvenes en Alemania sin cualificación profesional alcanzó una cifra récord en 2022, con 2,86 millones de ciudadanos de entre 20 y 34 años, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

Los datos indican que la cifra corresponde al 19,1 por ciento de este grupo de edad, mientras que en 2021 eran 2,64 millones, es decir, el 17,8 por ciento. Aún no se dispone de las cifras correspondientes a 2023.

El nuevo informe de formación profesional para 2024, a cuyo borrador tuvo acceso dpa, será presentado por el gabinete del canciller Olaf Scholz en las próximas semanas.

Según el documento, el número de adultos de entre 20 y 34 años sin cualificación profesional formal no ha dejado de aumentar desde 2015 (1,9 millones), una tendencia “particularmente crítica en el contexto de la creciente escasez de mano de obra cualificada y las tendencias demográficas”.

El informe alerta que las personas poco cualificadas son las que tienen un mayor riesgo de convertirse en desempleados de larga duración.

En este contexto, también destaca la relevancia de la tasa de contratos de formación rescindidos, que en 2022 fue del 29,5 por ciento, superior a la de años anteriores.

En 2021, el 26,7 por ciento de los contratos de los aprendices fueron rescindieron de forma anticipada. Sin embargo, los expertos aclaran que no en todos los casos esto significa que se haya cancelado la formación, ya que, por ejemplo, ciertos aprendices cambian de empresa para cualificarse en una profesión.

A su vez, solo el 18,9 por ciento de las empresas de Alemania ofreció algún tipo de formación en 2022, otro récord negativo. Los datos detallan que sobre todo las muy pequeñas se retiraron del programa de formación de personal.

La Confederación Alemana de Sindicatos (DGB) expresó su preocupación por los datos. “Parece que el número de jóvenes sin cualificación profesional sigue aumentando sin control”, declaró Elke Hannack, vicepresidenta de la DGB.

Hannack criticó que, a pesar de las numerosas plazas sin cubrir, desde hace años no es posible dar a todos los jóvenes una oportunidad de formarse. “Con este telón de fondo, el debate sobre la creciente escasez de mano de obra cualificada suena ciertamente a burla para muchos jóvenes”, añadió.

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