Washington, 14 abr (elmundo.cr) – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, afirmó que no devolverá a Estados Unidos a Kilmar Ábrego, un migrante deportado “por error” a una megacárcel salvadoreña.
“¿Cómo puedo devolverlo a EEUU? ¿Introducirlo de contrabando? Claro que no lo voy a hacer. La pregunta es absurda”, declaró Bukele durante una reunión con Donald Trump en la Casa Blanca, según USA Today.
Bukele acusó a Ábrego de ser terrorista, a pesar de que sus abogados cuestionan esta afirmación. Ábrego, quien vivió en Maryland durante una década con su familia, fue deportado el 15 de marzo.
El gobierno estadounidense reconoció el error, pero la fiscal general Pam Bondi indicó que la decisión de repatriarlo recae en El Salvador. “Eso depende de El Salvador si quieren devolverlo. No nos corresponde a nosotros”, dijo Bondi a The Associated Press.
El senador demócrata Chris Van Hollen solicitó una reunión urgente con Bukele para discutir el regreso de Ábrego. “Si Kilmar no está en casa a mitad de semana, planeo viajar a El Salvador esta semana para verificar su condición y discutir su liberación”, advirtió Van Hollen en una carta dirigida al embajador salvadoreño en Washington. Una corte federal estadounidense dictaminó que Ábrego debe ser devuelto a EEUU, decisión ratificada por la Corte Suprema.
El gobierno estadounidense confirmó que Ábrego se encuentra en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador. Michael Kozak, del Departamento de Estado, declaró que Ábrego está detenido “de conformidad con la autoridad soberana y nacional de El Salvador”. La deportación se produjo a pesar de las protecciones legales vigentes para Ábrego, según documentos legales citados por NBC News.
La esposa de Ábrego, Jennifer Vásquez Sura, lo reconoció en un reportaje televisivo en la megacárcel. Su abogado, Simon Sandoval, cuestiona la acusación de terrorismo, argumentando que se basa en “un informante confidencial” sin “pruebas contundentes”.
