Brasilia, 26 abr (elmundo.cr) – El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro se manifestó en contra de que su país sea reconocido como un destino turístico para la comunidad LGTBI.
Durante un desayuno con periodistas en el Palacio de Planalto, Bolsonaro señaló que “si querés venir a tener sexo con una mujer, adelante. Pero no podemos dejar que este lugar sea conocido como un paraíso para el turismo gay. Tenemos familias.”
Además agregó que defiende las costumbres conservadoras y que no quiere que Brasil se vuelva un país del “mundo gay”.
Estos comentarios fueron condenados por activistas LGTBI del país.
Por su parte el congresista de Río de Janeiro, David Miranda dijo que “esto no es un jefe de Estado, es una desgracia nacional”, durante una entrevista con el diario The Guardian.
Mientras que Jean Wyllys, otro destacado activista LGTB, comentó que comentarios de este tipo incitan al odio contra las minorías.
Bolsonaro ya había reconocido públicamente que es “homófobo” y en entrevistas llegó a afirmar que preferiría tener un hijo muerto que un hijo homosexual.
“Sí, soy homofóbico, y estoy muy orgulloso de ello”, sentenció.
