Neubiberg/Kulim (Alemania/Malasia), 8 ago (dpa) – El fabricante alemán de chips Infineon planea abrir una nueva fábrica en Malasia, anuncio que llega poco después de que la empresa revelara la reducción o reubicación de un total de 2.800 puestos de trabajo.
Los primeros productos de la planta de Kulim en el país asiático se entregarán a los clientes en el otoño europeo, según el director general de la compañía, Rutger Wijburg.
La primera fase, en la que Infineon ya está invirtiendo 2.000 millones de euros (2.187 millones de dólares), debería estar a pleno rendimiento a finales de 2026 o principios de 2027.
Sin embargo, la empresa ya ha anunciado una nueva ampliación de la planta en una segunda fase, que costará hasta 5.000 millones. El calendario es flexible: en función de la situación del mercado, la ampliación puede acelerarse o cancelarse.
En las nuevas instalaciones, Infineon utilizará carburo de silicio como materia prima para sus semiconductores. Según Wijburg, este material es especialmente robusto y permite fabricar semiconductores especialmente eficientes, pero su productividad es todavía pequeña, lo que encarece los productos.
“Esto tiene un valor añadido para los clientes, sobre todo cuando se trata de hacer algo más pequeño, más eficiente o más potente”, aseguró el directivo. “Si logran que las baterías sean más pequeñas o tengan un mayor rendimiento energético, merece la pena”, agregó, sin revelar si Infineon también ganará más con los chips más caros.
Los campos de aplicación típicos de sus productos son los coches eléctricos, las centrales solares y eólicas o los centros de datos de inteligencia artificial.