Berlín, 15 ene (dpa) – Con una larga columna de tractores, miles de agricultores descargaron hoy su ira contra el Gobierno alemán al mando del socialdemócrata Olaf Scholz y el fin de las exenciones fiscales al diésel.
“Si retiran las propuestas de subida de impuestos, entonces nos retiraremos”, lanzó el presidente de la Asociación Alemana de Agricultores, Joachim Rukwied, en una concentración ante la Puerta de Brandeburgo que constituyó el punto culminante de una semana de protestas del sector.
El ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, justificó los planes de ahorro en un discurso acompañado de abucheos y silbidos, pero se mostró abierto a otorgar alivios en otros ámbitos.
Al margen de la manifestación, los presidentes de los tres grupos parlamentarios del Gobierno de coalición -socialdemócratas, verdes y liberales- se reunieron con las organizaciones agrarias.
Rukwied señaló que la manifestación enviaba una señal: “Ya basta, demasiado es demasiado”. Aseguró que el sector está dispuesto a hablar, pero rechazó la solución de compromiso ofrecida por el Ejecutivo. “No lo aceptaremos”, fue rotundo el dirigente.
El presidente de los agricultores dijo que hay que seguir garantizando un suministro seguro de alimentos nacionales, que en sus palabras también es base de una democracia estable.
Según los primeros informes policiales, unas 8.500 personas y unos 6.000 vehículos participaron en el “tractorazo”. La asociación de agricultores no dio un número exacto de participantes, pero estimó en unos 30.000 los manifestantes.
La concentración fue el punto culminante de una semana de acción en la que agricultores de toda Alemania se han movilizado en los últimos días contra los ya debilitados planes del Gobierno germano.
El subsidio al gasóleo agrícola, vigente desde hace más de 70 años, será suprimido de forma gradual hasta 2026.
En un principio, esta exención iba a suprimirse con efecto inmediato, pero el Gobierno aceptó hacerlo de forma escalonada para calmar los ánimos. Asimismo renunció a derogar la exención del impuesto de vehículos de motor para los vehículos agrícolas.
El titular de Finanzas Lindner declaró en la manifestación que la protesta ya ha tenido éxito y que el Gobierno ha escuchado los argumentos.
“No debe ni tiene que haber ningún sacrificio especial para la agricultura, solo una contribución justa”. Y subrayó: “Si se elimina el gasóleo agrícola, también deben eliminarse paso a paso las cargas que soportan las explotaciones”.
Entre otras cosas, el ministro propuso anular trabas burocráticas y mejorar las normativas medioambientales y de cría de animales para facilitar el trabajo de agricultores y ganaderos. Planteó además la posibilidad de implementar desgravaciones fiscales si los beneficios fluctúan mucho de un año a otro.
Lindner calificó las protestas de los agricultores de legítimas y pacíficas. Cuando subió al atril del escenario, lo acompañaron silbidos y gritos de protesta. Rukwied hizo un llamamiento a los manifestantes y pidió respeto para el ministro.
Desde por la mañana, tractores, camiones y otros vehículos se alinearon en varias filas en la avenida del 17 de junio y el bulevar Unter den Linden.
Los tractores ya habían recorrido la capital durante la noche, haciendo sonar sus bocinas. Por la mañana, en los vehículos podían leerse lemas como “No hay futuro sin agricultores” y “Transporte made in Germany – ¿hasta cuándo?”. En la Columna de la Victoria, los manifestantes llevaban chalecos con el lema “Nosotros somos el pueblo”.
Solidarizada con los agricultores, la industria del transporte pidió al Ejecutivo un cambio de rumbo. “Nuestro sector también está harto”, gritó Dirk Engelhardt, portavoz de la Asociación Federal de Transporte por Carretera, Logística y Eliminación de Residuos (BGL), en la manifestación.
Engelhardt criticó el aumento del peaje para camiones, que ahora también incluye un recargo por CO2. Se dice que este gravamen pretende beneficiar a la transformación, continuó, pero al mismo tiempo faltan estaciones de recarga adecuadas y redes eléctricas para convertir el transporte logístico en respetuoso con el clima.