Alajuela, 6 dic (elmundo.cr) –Desde Crucitas Rolando Araya insistió en anunciar su decisión de que, de ser presidente, destinará la riqueza que ese oro genera a luchar contra la pobreza en que viven miles de familias costarricenses.
“No solo en la finca Crucitas, sino en la zona, hay decenas de miles de millones de dólares, suficiente para pagar la deuda pública, suficiente para arreglar la economía nacional”, dijo el aspirante presidencial durante su visita a la zona.
Para Araya, aunque algunos adversan la extracción del oro, hay niños con hambre, adultos mayores sin poder comprar medicina y mucha gente trabajadora desempleada, por lo que considera que se debe de comenzar a sacar provecho de las riquezas del subsuelo que tiene el país.
“Lo que están planteando quienes mandan y quienes les ayudan al gobierno es poner más impuestos, despedir gente y paralizar la economía nacional, teniendo esta inmensa riqueza que Dios nos dio. Pienso en lo que podría hacer con las amas de casa, con las mujeres que trabajan en los hogares, porque aquí hay dinero para todo el pueblo, con esto sacamos a Costa Rica adelante, con esto superamos la crisis, con esto resolvemos los problemas económicos y sociales”, indicó.
Además, el candidato presidencial aseguró que quienes se están robando el oro han causado gran daño ambiental y nadie dice ni hace nada, por eso desea cambiar la complicada situación que se vive en ese sitio.
Araya aseguró que parte de su estrategia es hacer una operación financiera para beneficiar a las personas más más necesitadas del país, las empresas, los pensionados, las mujeres, los créditos para los agricultores, y los emprendedores.
“La única manera para que la economía nacional salga adelante es con el planteamiento que yo tengo. Los otros candidatos solo quieren poner impuestos y eso no sirve. Ni las empresas ni la gente aguantan más impuestos, es por eso que tenemos que aprovechar los más de 40 mil millones de dólares que tenemos”, expresó.
Araya lleva más de tres años investigando Crucitas en conjunto con un equipo de geólogos lo cual, sostiene, le ha permitido idear un plan para evitar la contaminación ambiental que hoy envenena las tierras de la zona.
“Aquí se pueden ver los huecos que dejan las explotaciones ilegales clandestinas que están haciendo mayoritariamente extranjeros que se están llevando esta riqueza”, manifestó tras recorrer el perímetro de la finca Crucitas.