San José, 14 ene (elmundo.cr) – Los resultados del Índice Mensual de Actividad Manufacturera (IMAM) a noviembre 2018, confirman que la Industria Manufacturera continúa en desaceleración ya por 15 meses y que la Industria Manufacturera de Régimen Definitivo (fuera de zona franca), peor aún, está en recesión.
Con la aprobación de la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas se atacó la principal fuente de inestabilidad de corto plazo en variables como las tasas de interés, la devaluación y la inflación.
Pero quedaron enormes nubes del bajo crecimiento, enormes nubes de desaceleración, enormes nubes de la recesión en algunos sectores y enormes nubes del alto desempleo, por lo que los esfuerzos que debemos hacer como país para reactivar nuestra economía, son enormes.
La Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) señaló que la tasa interanual IMAM a noviembre fue de apenas un 1,6%, que es menos de la mitad de la que mostraba al mismo mes de 2017 (3,6%).
A pesar de que los Regímenes Especiales, como zona franca, continúan presentando un comportamiento positivo y con una moderada aceleración en los últimos cinco meses, las tasas negativas en el Régimen Definitivo, provocan que la desaceleración de la Industria Manufacturera como un todo continué.
La actividad manufacturera en el Régimen Definitivo (fuera de zona franca) presenta desde diciembre 2017 una tendencia a la desaceleración que incluso lleva a tasas negativas en junio, julio, agosto, setiembre, octubre y noviembre (ubicándose en este último mes en un -4,2%).
Francisco Gamboa director ejecutivo de la CICR señaló que “la acumulación de seis meses de tasas negativas de crecimiento podría llevar a calificar que la Industria Manufacturera del Régimen Definitivo está pasando por un proceso de recesión económica”.
“La contracción en los últimos meses de la Industria Manufacturera en el Régimen Definitivo se presenta particularmente en actividades como la fabricación de productos metálicos (-19,4% interanual a noviembre), la producción de productos de papel cartón e imprentas (-11,8% interanual a noviembre), y la producción de productos químicos y plásticos (-10,6% interanual a noviembre)”, agregó.
Según Gamboa “la desaceleración de las actividades del Régimen Definitivo, como hemos señalado en oportunidades anteriores se explica, por factores como el menor crecimiento de la demanda interna, la caída de las exportaciones manufactureras a Nicaragua, la incertidumbre generada por el deterioro de la situación fiscal del país y sobre si se iba o no a aprobar el Proyecto de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas”.
Además, dicha desaceleración se vio reforzada, desde inicios de setiembre, por los efectos negativos que sobre la actividad económica tuvo la huelga de empleados públicos contra dicho proyecto, y que se mantuvo por parte del sector educación prácticamente todo el año, concluye.
