San José, 28 may (elmundo.cr) – La Cámara de Industrias de Costa Rica señaló la urgencia de lograr un adecuado balance entra la salud física y la salud económica del país y de toda Centroamérica.
Enrique Egloff, presidente de la CICR resaltó la importancia de atender la salud física de las personas, pero también la salud económica de las empresas, la industria, el comercio, el turismo y todas aquellas actividades que favorecen el empleo y por ende el ingreso de todas las familias.
Egloff señaló que “como país, hemos priorizado la salud y la vida de los costarricenses con apoyo firme del sector productivo. El Covid-19 cambió al mundo y nuestras vidas, y debemos entender que la nueva normalidad será distinta y para crearla, debemos hacerlo juntos”.
“No dudamos del riesgo sanitario de tener más pérdidas de vidas humanas si regresamos a la normalidad anterior y no atendemos las indicaciones de las autoridades de cuidar nuestra salud y protegernos, pero no podemos debilitar más nuestra economía”, explicó.
Los industriales señalaron que el continuo debilitamiento y deterioro de la economía tendrá efectos catastróficos y es por ello, que debemos brindarle la urgente atención, pues en caso contrario, se deteriorará incluso la capacidad de nuestra institucionalidad de la salud para brindar una respuesta oportuna.
“Corresponde a las autoridades de Gobierno y profesionales de las ciencias médicas definir políticas y acciones para atender y velar por la salud física de nuestro país, pero también corresponde a las autoridades de economía y comercio, incorporar seriamente en las acciones el conocimiento y experiencia de los empresarios pequeños, medianos y grandes, para atender la grave situación del comercio regional; el Gobierno debe comprenderlo y aceptarlo”, mencionó Egloff
Egloff indicó que “nuestras autoridades económicas de Gobierno tienen una enorme responsabilidad en estos momentos y no se debieron tomar acciones unilateralmente, sin tomar en consideración las propuestas de quienes conocemos la realidad operativa y práctica del comercio centroamericano. El momento en que nos encontramos nos debe llevar a compartir y asumir liderazgos entre las autoridades de salud y las económicas, con la participación seria y responsable de la empresa privada”.
Los industriales solicitaron de manera respetuosa pero firme mayor flexibilidad. “No se deben imponer medidas extremas, inconvenientes y desbalanceadas que persigan en reducir a cero el riesgo de contagio; debemos comprender que con COVID-19 ello es imposible de alcanzar. No debemos aplicar políticas sanitarias con esa premisa, pues de hacerlo, se lesiona seriamente la economía y conllevaría a una crisis social que agravaría la situación”, comentó Egloff.
Así mismo, la Cámara de Industrias reiteró que es el sector productivo quien conoce la logística y la realidad centroamericana y pueden ayudar a mitigar tanto el riesgo sanitario como el impacto en las actividades que permiten la generación de empleo.
“Es urgente actuar con el balance señalado, sin discriminación, con propuestas de solución viables e innovadoras, consensuadas con los centroamericanos, tomando en cuenta a transportistas, sector productivo, consumidor y ciudadanos, pues todos enfrentamos problemas y retos comunes, en nuestra búsqueda de avanzar hacia una verdadera integración regional. Debemos actuar con urgencia y efectividad y tener claro que, de no hacerlo, podemos destruir el comercio regional y con ello al sector productivo y el empleo. El Gobierno, al cual le reiteramos que somos aliados en la construcción y el desarrollo socioeconómico de nuestro país, debe tomarse este tema con la mayor seriedad”, finalizó Egloff.