Saprissa vive un verdadero calvario en el segundo semestre del 2024: ya ha perdido cuatro de las cinco copas disputadas y solo mantiene la posibilidad de revalidar el título nacional en diciembre. Ante este panorama, la expectativa de la afición morada se centra en la posible salida del técnico Vladimir Quesada. Sin embargo, hasta la noche de este domingo, el timonel continúa en su puesto. Pero, ¿por qué no renuncia?
Quesada, tetracampeón nacional con el club, reveló que su permanencia en el cargo no depende de una decisión personal, sino de la estructura contractual que tiene con el Deportivo Saprissa. “Yo soy un empleado de planta aquí. Ya lo he dicho varias veces, no tengo un contrato diferente en comparación con todos los que trabajan aquí”, aseguró.
“La decisión la tienen las autoridades del club, yo solo acataré lo que decidan ellos”, agregó, dejando claro que su futuro está en manos de la directiva. Ante la pregunta de si él no tomará la decisión de regresar a su antigua posición en la estructura de Liga Menor, Quesada sostuvo que “será una conversación en conjunto con sus jefes”.
A pesar de la difícil situación, Quesada sigue convencido de que el equipo ha jugado bien y ha merecido más de lo que ha obtenido en los últimos partidos. Sin embargo, los resultados recientes son preocupantes: el martes, Antigua eliminó a Saprissa del Torneo de Copa con una goleada de 3-0 en Tibás, y este domingo, Puntarenas se impuso 2-3 en el campeonato nacional.
Por su parte, el presidente del equipo morado, Juan Carlos Rojas, ha comentado que el nivel del equipo no es bueno y que las decisiones sobre el futuro del cuerpo técnico se tomarán si el rendimiento en el camerino no mejora. En medio de esta incertidumbre, la afición se pregunta si Quesada logrará revertir la situación o si su tiempo al frente del equipo ha llegado a su fin.