En una noche fría en el Estadio Nacional, Pérez Zeledón logró un valioso empate 0-0 frente a Liga Deportiva Alajuelense, en un partido donde la insistencia manuda chocó contra la resiliencia generaleña. La Liga, respaldada por su afición, buscó el gol por todas las vías posibles, pero la figura del guardameta Bryan Segura y el planteamiento estratégico de Horacio Esquivel le negaron el triunfo.
Una afición inconforme
El ambiente en las gradas reflejaba el malestar de la afición rojinegra. La barra organizada “La Doce” mostró mantas en señal de protesta, criticando a la directiva, a Javier Santamaría y a los jugadores. Entre los mensajes destacó uno contundente: “Puntuales para cobrar, muertos para ganar copas”.
Un Alajuelense que dominó sin definir
Desde el inicio, Alajuelense asumió el rol protagónico. Con Diego Campos, Aarón Suárez y Anderson Canhoto liderando los ataques, los rojinegros generaron peligro constante. Sin embargo, Bryan Segura se convirtió en la figura del encuentro al detener un penal cobrado por Alberto Toril al minuto 14 y mantenerse firme ante las reiteradas llegadas manudas.
La pena máxima surgió tras una falta de Jefferson Rivera sobre Aarón Suárez, pero el portero generaleño adivinó la dirección del disparo y frustró el primer gol del partido. En el rebote, Diego Campos tuvo otra oportunidad, pero su cabezazo se fue por encima del marco.
Pérez Zeledón aguanta y contraataca
En la segunda mitad, los Guerreros del Sur abandonaron su planteamiento defensivo para buscar sus propias oportunidades. Justin Roques y Abner Hudson comenzaron a generar peligro, y Washington Ortega, debutante en el arco manudo, respondió con solvencia. El portero uruguayo mostró sus reflejos al detener un remate de Jorkaeff Azofeifa y mantener su arco en cero.
A pesar de que Pérez Zeledón tuvo pocas llegadas, las oportunidades que creó fueron claras, destacando una acción veloz de Creichel Pérez al minuto 61 que estuvo muy cerca de convertirse en gol.
La frustración rojinegra
Alajuelense lo intentó hasta el final, pero el gol no llegó. Incluso un remate de Anderson Canhoto terminó estrellándose en el poste, incrementando la frustración del equipo dirigido por Alexandre Guimaraes. La Liga dominó el partido, pero la defensa generaleña y las intervenciones de Segura impidieron que el marcador se moviera.
Un empate con sensaciones distintas
El resultado le sabe mejor a Pérez Zeledón, que días atrás también logró puntuar contra Saprissa, y demuestra su capacidad para resistir ante los grandes del fútbol nacional. Para Alajuelense, sin embargo, el empate deja un sabor amargo, al reflejar una falta de contundencia que genera preocupación entre sus aficionados.
El empate fue una prueba de carácter para los Guerreros del Sur y una lección para los manudos, quienes deberán mejorar en definición si quieren mantenerse en la lucha por el campeonato. Mientras tanto, Pérez Zeledón se lleva un punto que premia su valentía y esfuerzo en La Sabana.
