El marcador dirá que Saprissa ganó 2-1, pero el juego dejó sensaciones muy distintas. En su visita a Verdes FC por la Copa Centroamericana, los morados cumplieron con el resultado, pero terminaron sufriendo más de lo esperado ante un rival que en el papel parecía muy inferior.
El inicio fue prometedor. A los dos minutos, Deyver Vega aprovechó una jugada construida por Gerson Torres y Orlando Sinclair para abrir el marcador. Ese arranque hacía pensar que se venía una noche tranquila, quizá hasta con goleada. Pero eso nunca ocurrió.
Saprissa se desdibujó rápidamente. La falta de precisión en los pases, la desconcentración y un rival que se animó a salir del encierro complicaron el panorama. Verdes fue ganando confianza y al cierre del primer tiempo consiguió el empate gracias a Bryan Lozano, al 45+3’.
Con ese golpe, Saprissa se fue al descanso con dudas. Regresó mejor y logró el 1-2 con un buen movimiento de Sinclair, tras pase filtrado de Jefferson Brenes. Sin embargo, en lugar de controlar el partido, los tibaseños terminaron replegados.
El cierre fue incómodo. Verdes se adueñó del balón y empujó al campeón nacional contra su propio marco. Saprissa resistió, pero no lució. Terminó defendiéndose en lugar de imponer condiciones. Fue una victoria sin brillo, que deja más preguntas que certezas.
El equipo de Paulo Wanchope sumó su segunda victoria en la Copa Centroamericana, pero necesita elevar su nivel. En Belice se ganó, sí, pero se sufrió innecesariamente. El reto ahora será mostrar una versión más convincente en los próximos partidos.