París, 28 may (elmundo.cr) – ¡El Real Madrid económico lo volvió a hacer!. El Real sin Cristiano, el que ahora le dice a Mbappé que se quede con su París pero se olvide las Champions, el grande y no por nombres de jugadores sino por su identidad.
Los blancos hoy volvieron a tocar el cielo con la Torre Eiffel como testigo y ganaron su Champions número 14, confirmando que fueron y siguen siendo los reyes de Europa.
En su camino, los madrileños se sacaron de encima a tres pesos pesados a punta de actitud, de amor por la camiseta que arroyo a los del PSG, Chelsea y Manchester City porque no tendrá el juego más vistoso pero sí el equipo más luchador.
Nadie se lo merece más, nadie la ha sufrido tanto cómo Ancelotti y compañía, que hoy demuestran que sino hay grandes figuras otros jugadores asumirán pero nunca nunca dejarán de ser GRANDES.