San José, 12 de marzo (elmundo.cr)- . Las Leonas no logran tener una regularidad en el torneo a pesar de las individualidades con la que goza el técnico Wílmer López, porque en el equipo femenino no se puede hablar de equipo. No existe, no aparece la colectividad.
Las rojinegras no reflejan ese juego colectivo que demanda el fútbol. Dependen de una buena acción que tenga alguna de sus figuras, una buena noche de Marta Cox, o que María Paula Salas tenga un tiro de suerte.
Que Mariela Campos no se desgaste o que sus defensas centrales no topen con una delantera que las exponga como lo hizo esta noche Nathaly Nájera con su triplete.
También depende de que Yalitza Sánchez no se sienta inamovible en el arco.
Las manudas mordieron el polvo (4-3) en un juego en el que necesitaba sumar de tres puntos para seguir en la parte mas alta de la tabla. Y cada vez que necesita ganar para tomar la cima, pierde.
El técnico Wílmer López considera que su equipo fue presa de sus propios errores cuando tenían el juego a su favor con 0-2.
“Cuando íbamos ganando, dos por cero, creímos que teníamos el juego ganado. No quiero que se entienda que le quitamos mérito al rival, no. Suva fue un equipo aguerrido y luchador, pero nosotros cometimos errores en ofensiva y en defensiva que les terminó de dar armas a ellas para meterse en el partido, al final nos salió el tiro por la culata”, dijo López.
La mediocampista, Marinellis Oporta, considera que el equipo manudo sigue pecando en la definición y en defensa.
“Tenemos opciones para concretar y no lo hacemos. Luego, nos vemos con el marcador abajo y queremos ir a buscar el empate y eso nos genera que cometamos errores en defensa. Tenemos que mejorar esto para el próximo juego”, explicó Oporta.
La Liga se mantiene latente con opciones de buscar el primer puesto, pero no puede sufrir otro traspié porque las opciones se cierran.
