San José, 26 nov (elmundo.cr)- A estas altura del año, se puede decir que no hay jugador en el Barcelona que se entienda mejor en la cancha con Leo Messi, que el mismo Jordi Alba, quién corre feliz sabiendo que el 10 siempre lo ve. No solo lo ve sino que, además, es capaz de dejarle solo ante cualquier portero esquivando por el aire toda defensa que se le ponga por delante.
El lateral derecho que se formó en el Valencia y luego fue fichado por el Barcelona en el año 2012, siempre está atento a que la bola llegue y que aparece por sorpresa y siempre está en el momento justo, incluso para Martín Montoya, quien menciona que siempre está, siempre llega cuando se necesita, son la dupla, el socio dentro de la cancha con Messi.
Luego del último partido y de su importante gol que salvó el invicto barcelonista, Jordi Alba, seguía indignado por el tanto de Leo Messi que el árbitro no quiso conceder en la primera mitad. “Es un error garrafal del árbitro. ¡Si yo que estaba en el medio del campo, he visto la pelota dentro!, de verdad es indignante” mencionó.
“Y es que en la temporada anterior en el partido ante el Betis ya nos pasó lo mismo y quién sabe si perdimos la Liga por aquella decisión arbitral. No puede ser que el balón entre tres metros y un árbitro no lo conceda. ¡Ésto hay que verlo!’. ¿El VAR?. Lógicamente la tecnología ayudará en jugadas como ésta”, expresó un poco molesto Alba.
Sobre un resumen del encuentro, Alba mencionó: “Creo que hemos hecho un gran partido; jugar en Mestalla nunca es fácil para ningún rival, yo lo sé bien porque he jugado aquí. Lo controlamos casi siempre. Hemos hecho una gran primera parte de la que debimos salir con ventaja en el marcador”.
“Luego, en la segunda, nos han hecho un poco de daño al contragolpe. Su gol, lógicamente, ha hecho que tuviéramos que tirarnos más arriba y, por fortuna hemos logrado, cuando menos, el empate”, manifestó Jordi.
Finalmente, Jordi Alba también lamentó el comportamiento del público hacia él cada vez que se mide a su ex equipo y mencionó: “El trato no es del todo bueno para mí (en Mestalla). Me da lástima que me reciban así. No lo entiendo, que sigan así después de 6 años. Solo pido respeto”.
Por otra parte, aunque el Barcelona apostó por el 4-4-2, donde la figura de Paulinho volvió a ser clave, Suárez sigue de impreciso y sin presencia apenas en la zona valenciana, no le dio mucho apoyo a su equipo. Pero el conjunto azulgrana se estructuró en torno a Busquets, el hombre que manejaba la presión, para incomodar al rival, un Valencia que no se quería dejar en el terreno de juego.
Parecía casi imposible que el Barça mantuviera esa agobiante presión en la segunda mitad, porque en la primera etapa los de Valverde se construyeron una buena contingencia que le proporcionaba recuperar el balón muy rápido .Poco a poco, ese equipo de azulgrana se fue apagando, herido por el gol de Rodrigo.
Barcelona luchó hasta el final, que parecía casi imposible que mantuviera el ritmo y fue ahí donde Valverde activó al equipo, especialmente, con la aparición de Denis Suárez, no así de Deulofeu, y sus jugadores le respondieron con personalidad para no rendirse.
